Los expertos señalan que los estudios deben ser más amplios y con un número de participantes mucho mayor para poder obtener datos extrapolables. No podemos plantearnos que nos engañan o que debemos dudar de todo porque no es así. Lo mejor es seguir los consejos de nuestro médico y preguntarle todo lo que nos preocupa.

Un producto que solemos cuestionarnos es el alcohol. Las campañas sanitarias alertan de que su consumo es peligroso y que los jóvenes empiezan a beber a edades cada vez más tempranas. Es fundamental no abusar de su ingesta y evitar conducir tras haberlo bebido.

Las grasas saturadas han sido despreciadas desde hace mucho tiempo, pero el colectivo científico está sufriendo una revolución porque se cree que no son tan malas como se pensaba. Siguen señalando que no debemos abusar de su consumo, pero no es imprescindible excluirlas completamente.

El pescado azul se consideraba malo porque contiene grasa… hasta que se descubrió que contiene omega 3 y 6 muy cardiosaludables. La tendencia actual es que debe ser incluido en nuestra dieta habitual debido, precisamente, a la presencia de estos compuestos.

El huevo aumenta el nivel de colesterol. Es cierto que lo contiene pero no se le puede culpar de ser el único factor que incrementa los niveles de colesterol malo. El consumo de ácidos grasos saturados, por ejemplo, incide mucho más en el aumento del colesterol dietético. El huevo, además, contiene lecitina que, junto a otros componentes, ayuda a nivelar el colesterol. Así que…no deberíamos eliminarlo completamente salvo indicación expresa de nuestro médico.

Los edulcorantes artificiales causan enfermedades. En realidad, no son tan malos como se ha ido extendiendo y constituyen la mejor opción para quienes no pueden tomar azúcar por diferentes motivos de salud. Lo indicado es no abusar de su consumo y consultar al médico el que mejor se adapta a ti.

Hay muchas otras ideas preconcebidas que han ido modificándose estos últimos años:

-Las agujetas se producen porque cristaliza el acido láctico tras un esfuerzo físico. En realidad, no se ha encontrado esta sustancia en los tejidos afectados y no hay que tomar azúcar para eliminarlas, pues ahora se cree que se deben a microrroturas musculares.

-El ibuprofeno es malísimo para el organismo. La verdad es que es un antiinflamatorio de primera elección y de eficacia demostrada. Lo malo es tomar dosis muy altas y durante mucho tiempo porque puede causar problemas cardiacos según está estudiando la Agencia Europea del Medicamento.

-El volumen de agua que debes beber a diario es de dos litros y medio. Lo importante es que tomes la que te indique tu médico porque la fuente de esta idea es una recomendación de 1945 del Consejo de Investigación Nacional de EE.UU. que fue mal interpretada y divulgada a nivel mundial.