Reglas básicas para el cuidado de las articulaciones

Sonia Baños

Cumplir años no tiene por qué estar reñido con tener una salud de hierro. Si te cuidas desde que eres joven podrás prevenir con total seguridad molestias como los dolores articulares o la falta de movilidad que están, generalmente, relacionadas con el paso de los años.

26/04/2015

Las enfermedades en las articulaciones las sufren más de 7 millones de españoles entre los 25 y los 75 años. Enfermedades como la artrosis tienen un gran impacto en nuestra sociedad. Pero no tienes por qué resignarte. Si detectas a tiempo los dolores articulares y pones medidas cumplirás años sin ...

Las enfermedades en las articulaciones las sufren más de 7 millones de españoles entre los 25 y los 75 años. Enfermedades como la artrosis tienen un gran impacto en nuestra sociedad. Pero no tienes por qué resignarte. Si detectas a tiempo los dolores articulares y pones medidas cumplirás años sin que tu cuerpo se resienta. 
 
- La artrosis no es sólo una enfermedad de gente mayor. Se produce por una pérdida del cartílago que es el tejido que forma parte de la articulación que une los huesos. Ante los primeros síntomas, toma medidas.
 
- El sobrepeso es uno de los mayores enemigos de las articulaciones. Sólo un 20% de sobrepeso aumenta el riesgo de artrosis así que, el primer paso es perder peso con una dieta sana y equilibrada.
 
- Realiza una actividad física a diario para que no se oxiden tus articulaciones. La mejor es caminar 30 minutos sobre un terreno firme y regular. La natación y el baile también son recomendables, ya que los movimientos que se realizan en estas disciplinas son especialmente suaves.
 
- Un sueño reparador es la mejor medicina. Por ello, es importante que te prepares para dormir como un lirón: date un baño caliente antes de ir a la cama y justo cuando te levantas. Mantén una postura correcta mientras duermes. No escatimes a la hora de escoger el colchón de tu cama. Elige uno que sea firme y un somier con láminas duras.
 
- Si notas dolor, sobre todo en las manos, evita actividades como la costura que supongan repetir muchas veces el mismo movimiento. Cuando cocines, ayúdate de los pequeños electrodomésticos para pelar, cortar, etc.
 
- Evita, en la medida de lo posible, los tacones. Para el día a día, opta por zapatos con suela gruesa que reduzca la fuerza del impacto al caminar. 
 
- No sobrecargues la espalda a la hora de sentarte. Para ello, escoge asientos con respaldo alto y recto y apoya los brazos en los reposabrazos o, en su defecto, en la mesa. Ves cambiando de posición cada 10 minutos, levántate unos segundos y muévete. 
 
- Incorpora a tu dieta alimentos que nutran tus articulaciones como la sardina, la caballa, la lechuga, la acelga, el apio, los espárragos o los lácteos.
 
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