Después de años de estudio e investigación, se acaba de presentar una técnica que, gracias a un nuevo láser para terapia fotodinámica y a un fármaco fotosensibilizante, ocasiona la necrosis de las células tumorales. Hasta ahora las lámparas LED en la terapia fotodinámica (PDT) producen escasa penetración de los medicamentos tópicos a través de la piel. Este nuevo láser, con gran capacidad de penetración, trata las lesiones dermatológicas pre-cancerosas y cancerosas de forma segura y eficaz. Los logros de esta nueva línea de abordaje terapéutico se han dado conocer por un equipo de dermatólogos que ha llevado a cabo un trabajo de investigación con un grupo de pacientes aquejados de lesiones dermatológicas benignas y pre-cancerosas.

La capacidad de regulación del nuevo láser Multidiode PDT 630™ Derma de Intermedic, permite que pueda trabajar tanto de forma tópica como intralesional (en patologías inflamatorias y tumorales), tratando lesiones de gran tamaño y grosor de forma segura y efectiva, mínimamente invasiva.


El daño solar en aumento

La sobreexposición al sol y otros factores está aumentando el riesgo de sufrir lesiones graves en la piel. El carcinoma basocelular es el tumor no melanocítico más frecuente de la piel. La incidencia en los últimos 20 años ha llegado a duplicar o incluso triplicar su número según zonas. La doctora Suárez Valladares, dermatóloga puntualiza  algunas de sus características: La lesión suele aparecer en zonas foto-expuestas (sobre todo la cara) y va aumentando lentamente de tamaño; habitualmente es asintomática o con ligero prurito; con frecuencia se ulcera y se cubre de una costra. Los pacientes  jóvenes y con un buen nivel sociocultural consultan antes; las personas mayores no le dan importancia, lo consideran algo de la edad.

La nueva terapia fotodinámica intralesional es una alternativa eficaz para el tratamiento del carcinoma basocelular (maligno) con unas tasas de curación del 95 %, similar a lo obtenido con cirugía. El tratamiento es alternativo, independientemente de la  profundidad del carcinoma, en pacientes luripatológicos o con alto riesgo quirúrgico, porque permite evitar cirugías complicadas.

Afecta o destruye de forma precisa y selectiva el tejido patológico, preservando el sano. Permite tratar con mínima invasión, con anestesia local y sin ingreso, varias patologías con magníficos resultados (cicatrices queloideas por ejemplo).

Si fuera necesario repetir la técnica, no existe riesgo alguno para la salud del paciente.