El Panteón de Hombres Ilustres es un ambicioso proyecto iniciado en el siglo XIX con la pretensión de convertirse Le Panthéon de París, pero que no se llegó a culminar lo proyectado. Hoy en día, posiblemente, sea uno de los enclaves menos conocidos de la parte monumental de Madrid, a ...
El
Panteón de Hombres Ilustres es un ambicioso proyecto iniciado en el siglo XIX con la pretensión de convertirse
Le Panthéon de París, pero que no se llegó a culminar lo proyectado. Hoy en día, posiblemente, sea uno de los enclaves menos conocidos de la parte monumental de Madrid, a diferencia de los países vecinos, en los que se encuentran mausoleos dedicados para recordar a sus glorias nacionales. En Lisboa, el
Monasterio de los Jerónimos se encuentran las tumbas del conquistador
Vasco de Gama y el escritor
Fernando Pessoa. La
abadía de Westminster, en Londres, acoge a un grupo de elegidos de la monarquía, las artes y las ciencias. Y en el mencionado
Panteón parisino se encuentran los restos de
Victor Hugo,
Voltaire y
Zola, entre otros. En el monumento que nos ocupa, en Madrid, doce nombres semiabandonados y poco publicitados en las guías turísticas de la capital de España.
Ideado por el arquitecto Fernando Arbós y Tremanti, de estilo neobizantino y de inspiración italianizante, y construido sobre los restos de la Basílica de Nuestra Señora de Atocha, prácticamente destruida después de haber sido devastada por las tropas francesas de ocupación en 1808. 'Nigra sunt sed famosa' fue el título del proyecto que presentó Arbós al concurso, y que ganó. En 1891 comienzan las obras, pero en 1899, cuando la basílica ni se había comenzado, los problemas económicos obligan a suspender el plan. Sólo el panteón y el campanil habían llegado a ser construidos. Además, se dio prioridad a las obras de la Cripta de la Almudena, con lo que el proyecto quedó condenado al olvido.
En 1901, y finalizadas las obras del panteón, se trasladaron allí los restos de Prim, Castaños, Manuel Gutiérrez de la Concha, Antonio Ríos Rosas y Palafox. Después, se añadieron los de Antonio Cánovas del Castillo, Juan Álvarez Mendizábal, Agustín Argüelles, Salustiano Olózaga, Antonio José María Calatrava, Práxedes Mateo Sagasta, Eduardo Dato, José Canalejas, Martínez de la Rosa y Muñoz Torrero. Entre los años treinta y ochenta del siglo XX, el Panteón es abandonado, y los restos de Castaños, Prim y Palafox son trasladados a Bailén, Reus y Zaragoza respectivamente.
En los años ochenta del siglo pasado se hace cargo del mausoleo el Patrimonio Nacional y restauran el edificio. En el complejo, un monumento funerario poco conocido incluso para los propios madrileños, se pueden ver las obras dedicadas a esos 12 ilustres españoles (Manuel Gutiérrez de la Concha, Antonio de los Ríos Rosas, Francisco Martínez de la Rosa, Diego Muñoz-Torrero, Juan Álvarez Mendizábal, José María Calatrava, Salustiano Olózaga, Agustín de Argüelles, Antonio Cánovas del Castillo, Práxedes Mateo Sagasta, Eduardo Dato y José Canalejas) de artistas de la talla de Mariano Benlliure y Pedro Estany. Solo por eso merece la pena visitarlo.
Panteón de Hombres Ilustres
c/ Julián Gayarre, 3, Madrid
Metro: Atocha Renfe y Menéndez Pelayo
Autobuses: 10, 14, 26, 32, C1, 24, 37, 54, 57 y 141
De martes a sábado (10:00 - 14:00 y 16:00 -18:30) y domingos y festivos (10:00 - 15:00). Acceso gratuito.