Partiendo de que la base del jabón es el aceite, podremos hacer jabón reciclando el aceite ya usado o utilizando aceite virgen. Si reciclamos el que ya tenemos, crearemos jabón natural que podremos utilizar, por ejemplo, para lavar ropa o fregar los platos. Si queremos elaborar un jabón corporal, sin embargo, utilizaremos aceite virgen.

Hacer jabón es tan sencillo como mezclar aceite y sosa cáustica y elegir el molde que quieras para darle forma a tu pastilla de jabón. No obstante, hay que tener en cuenta que la sosa es un elemento químico, y que, por lo tanto, habrá que tomar ciertas precauciones a la hora de tratarlo, como por ejemplo, utilizar guantes, mascarilla, y gafas que nos protejan de posibles salpicaduras. Encontrarás más información sobre el proceso detallado y las medias de seguridad aquí.

Pasando al nivel avanzado de esta ciencia artesanal, la diseñadora argentina Analía Blanco ha creado la Fábrica de jabón, un electrodoméstico que automatiza el proceso de fabricación del jabón y permite acortar los plazos. La autora asegura, sin embargo, que lo más destacable es que este artilugio facilita convertir medio litro de aceite usado en 350 gramos de jabón, y que eso evitará contaminar alrededor de 500 litros de agua.

¿No olerá mal el aceite usado?

No te preocupes por eso porque, después de colarlo, lo mezclaremos con la sosa y ésta eliminará todo olor que pueda haberle quedarle al aceite. Haciendo jabón casero no sólo nos reencontraremos con las esencias naturales, sino que le haremos un gran favor al medio ambiente, puesto que reutilizamos aceite que, de lo contrario, es altamente contaminante.

Un regalo de lo más original

Si prefieres elaborar jabón con aceite virgen, coge papel y bolígrafo y prepárate para hacer un brainstorming de aromas, porque aquí se abre un mundo de infinitas combinaciones para seducir a quien quieras con tu jabón. Coco, mango, fresa, almendra, canela… Simplemente piensa para quién va a ser el jabón y a qué quieres que huela.

Por si el aroma fuera poco, en tiendas de repostería o en Internet podrás encontrar infinidad de moldes de lo más originales para darle la forma que quieras a tu jabón. También puedes comprar un sello y hacerle el dibujo que tú quieras o escribir algo especial con un punzón.

Eso sí, una vez desmoldado, tendrás que tener un poco de paciencia y esperar unas cuatro semanas antes de utilizarlo para que el jabón se cure…

Qué, ¿impaciente por comenzar?