Más guapas con unos cuantos pinchazos
Victoria Carmona
Como ya explicamos en un artículo anterior, cada vez son más las personas que optan por mejorar su rostro con tratamientos alternativos a la cirugía estética. Estos son menos costosos, menos dolorosos y también se pueden conseguir unos resultados visibles en poco tiempo.
Estos últimos tratamientos se basan en la aplicación mediante pinchazos en las capas de la epidermis de sustancias como vitaminas, botox, distintos tipos de ácidos e incluso dióxido de carbono. Eso sí, siempre bajo supervisión médica. Elige entre estas cinco opciones 1.- Factores de crecimiento plaquetario: células madre sanguíneas extraídas de una ...
Estos últimos tratamientos se basan en la aplicación mediante pinchazos en las capas de la epidermis de sustancias como vitaminas, botox, distintos tipos de ácidos e incluso dióxido de carbono. Eso sí, siempre bajo supervisión médica.
Elige entre estas cinco opciones
1.- Factores de crecimiento plaquetario: células madre sanguíneas extraídas de una muestra de sangre del propio paciente. Se utiliza, sobre todo, para la regeneración y aceleración en la cicatrización de heridas; así como en la regeneración natural de la piel ya que incide en la producción de colágeno y elastina. Se ha consolidado como una técnica muy habitual en la prevención de la caída del cabello y en redensificación capilar.
2.- Hidroxipatita cálcica: este mineral que forma parte de la composición natural de los huesos, se utiliza para rellenar arrugas profundas y combatir la flacidez, así como reponer pequeños volúmenes en nariz o mandíbula. El efecto lifting es casi inmediato, aunque se notará más pasados tres meses.
3.- Poliprolactona: poliéster biodegradable sintético que estimula la producción natural de colágeno. Corrige arrugas de manera inmediata y aporta volumen gracias a la bioestimulación que provoca. Dura entre 9 y 12 meses.
4.- Silicio orgánico: este mineral está presente de manera natural en la piel. Como tratamiento, se infiltra con una microaguja para recolocar las facciones y tejidos afectados por la flacidez, como el óvalo facial, los pómulos o la parte interna de los músculos.
5.- Dióxido de carbono: es un gas que provoca una micro vasodilatación sanguínea en un área de 10 cm alrededor de la zona pinchada, que induce al organismo a incrementar la oxigenación de la piel. Se indica como tratamiento contra la celulitis, flacidez, grasa localizada, ojeras, bolsas, etc. Dependiendo el objetivo son necesarias entre 5 y 12 sesiones. Carece de efectos secundarios.
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