Gimnasia facial para reafirmar tu rostro
Levantar las cejas, guiñar un ojo o poner muecas son sencillos ejercicios que consiguen trabajar los músculos de la cara consiguiendo una piel más tersa y radiante.
El estrés del día a día, no dormir las horas suficientes o la mala alimentación, son algunos elementos que influyen en la pérdida de luminosidad de la piel. La gimnasia facial es un must para rejuvenecer de forma natural. ¿Qué beneficios tiene? • Si se realiza de forma regular se consigue una ...
El estrés del día a día, no dormir las horas suficientes o la mala alimentación, son algunos elementos que influyen en la pérdida de luminosidad de la piel. La gimnasia facial es un must para rejuvenecer de forma natural.
¿Qué beneficios tiene?
• Si se realiza de forma regular se consigue una mejor oxigenación y circulación de la piel.
• Los ejercicios tienen un efecto relajante que ayudan a evitar el estrés provocado por la actividad diaria.
¿Cómo preparase?
Antes de realizar los ejercicios es importante relajar la musculatura de la cara, el cuello y los hombros. El hotel Barceló Raval propone un masaje facial aplicado con la mayor sutileza en la cara y el cuello proporcionando una mayor relajación, tanto muscular como mental, aportando hidratación al rostro y mejorando la calidad de la piel. PVP: 71 € / 45 min. También puedes hacerlo tú misma con una crema de aromaterapia para facilitar la relajación.
¿Cuáles son los ejercicios?
1. Para un cuello de cisne y una barbilla moldeada. Ponte delante de una mesa y apoya el brazo derecho en vertical y con el puño cerrado debajo del mentón. Haz fuerza durante unos seis segundos. Lo importante es sentir que los músculos del cuello se tensan.
2. Combatir las patas de gallo. Coloca los dedos de la mano en las sienes e intenta que lleguen a la parte superior de las orejas. Abre la boca y desplaza la mandíbula de delante a atrás. Con este movimiento los músculos de las sienes se tensan y fortalecen.
3. Mejillas siempre jóvenes. Hincha las mejillas con aire y golpea suavemente con las yemas de los dedos sobre ellas. Al echar el aire hay que sentir un cosquilleo en los mofletes.
4. Desdibujar las líneas de expresión de la frente. Coloca los dedos de ambas manos sobre la frente de tal manera que la palma esté en contacto con ella y que la punta de los dedos se toquen. Presionando hacia arriba sentir que los párpados, las cejas y los músculos se tensan.
Ya no hay excusas para no lucir un rostro más luminoso y terso.
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