La nueva revolución de Apple ataca las teclas de función

Guillem Alsina

La Touch bar será personalizable de acuerdo con la aplicación que estemos utilizando, eliminando así una rémora -según Tim Cook- vigente desde los inicios de la informática.

29/10/2016

Este jueves hubo keynote de la compañía de la manzana en San Francisco, lo que equivale a centrar la atención del mundo tecnológico, preparado para hacer verter ríos de tinta sobre una empresa que ha conseguido ser líder a base de revolucionarios conceptos y arriesgados movimientos. El último, la sustitución ...

Este jueves hubo keynote de la compañía de la manzana en San Francisco, lo que equivale a centrar la atención del mundo tecnológico, preparado para hacer verter ríos de tinta sobre una empresa que ha conseguido ser líder a base de revolucionarios conceptos y arriesgados movimientos. El último, la sustitución de las teclas de función del MacBook Pro por una pequeña pantalla multitáctil, la Touch Bar.

 

Pero ¿a qué sustituye exactamente esta barra táctil? Según indicaba Tim Cook en su presentación, las teclas de función son un anacronismo de los primeros tiempos de la informática, en los cuales se utilizaban como atajos de teclado para la realización, valga la redundancia, de determinadas funciones. Por si alguno se lo está preguntando, son las que encontramos en la parte superior del teclado, numeradas de la F1 a la F12.

 

De hecho, en los MacBook Pro, estas teclas ya las encontrábamos muy camufladas, con los numerales F en un plano secundario frente a iconos que enlazaban con funciones de uso habitual en el Finder.

 

A partir de ahora, los iconos mostrados en esta barra, y que suplirán a las teclas de función, serán personalizados para cada aplicación, es decir, que los programadores podrán manejar la barra a su medida para mostrar lo que crean conveniente. Será preciso ver cuál será su soporte bajo otros sistemas operativos como Windows o GNU/Linux.

 

Además del lógico incremento de potencia respecto a los modelos anteriores de la misma serie, el nuevo MacBook Pro es también más ligero y delgado. La nueva carcasa metálica unibody (realizada en una sola pieza) lo hacen más robusto y compacto que los anteriores modelos, y también gracias al uso de nuevos componentes como los discos flash para el almacenamiento interno, podemos disfrutar de una máquina un 17% más fina y un 23% más compacta, según las especificaciones que nos ha hecho llegar Apple, con un peso que se ha reducido unos 200 gramos.

 

Ayer mismo, un amigo me hacía la reflexión de que unos MacBook pro tan finos y compactos podían canibalizar fácilmente parte del mercado de los MacBook Air, ya que en un tamaño y peso similares (ligeramente mayores), ofrecen mayor potencia.

 

Además de estas novedades, los nuevos MacBook Pro presentados este jueves también incorporan el Touch ID integrado en el botón de encendido, lo que permite a los usuarios desbloquear el equipo con solamente mantener su dedo en el botón para que este lea su huella, dejando de lado las típicas contraseñas.

 

También encontramos pantallas Retina mejoradas, conectividad Thunderbolt 3, y la nueva versión del sistema operativo macOS Sierra.

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