De manera general, es necesario destacar que las bajas temperaturas ralentizan los procesos metabólicos y bajan las defensas de nuestro organismo, por lo que los virus encuentran una situación perfecta para desarrollarse y provocar enfermedades. Cualquier situación de este tipo debe ser diagnosticada y tratada por el médico, único capacitado para hacerlo.

De manera general se recomienda:

-A nivel nutricional, sería el momento de aplicar una dieta depurativa y saludable en la que se incluyan verduras, hortalizas y frutas con un bajo aporte calórico, pocas grasas (embutidos, quesos, etc.) y consumo limitado de hidratos de carbono (pan, pasta, etc.) para eliminar las toxinas acumuladas. Se recomienda incluir verduras estacionales (coles, calabazas, repollo, brécol), raíces (zanahorias, nabos, rábanos, etc.), alimentos bien cocinados (potajes, guisos, etc.) y alimentos en crudo en menor proporción (aunque sin eliminarlos completamente de la dieta).

-Desde la fitoterapia suelen recomendarse ciertas plantas con capacidad para depurar el hígado como el boldo, el cardo mariano o el diente de león. Sea cual sea la opción, debe consumirse bajo control médico porque, además de sus virtudes, pueden presentar efectos secundarios.

-Hacer ejercicio es fundamental para mantener el cuerpo y la mente a pleno rendimiento. La intensidad y frecuencia depende no solo de la edad sino de la composición corporal (porcentaje graso, muscular y óseo, fundamentalmente). Sería recomendable realizar cuatro horas semanales de ejercicio físico supervisado por profesionales que ayuden a conseguir los efectos deseados.

-Cuidar especialmente el aspecto de la cara y devolver a la piel fatigada toda su energía y vitalidad. Eliminar toxinas y fortalecer las defensas frente a la contaminación, el estrés y la acción de los radicales libres es importante. Sería recomendable utilizar compuestos específicos con vitamina C, oligoelementos, etc. y realizar masajes faciales en centros especializados.

-Aplicar tratamientos específicos para reducir las grasas acumuladas en el abdomen, que es el punto que más preocupa a los hombres porque les hace sentir “mayores”. La barriga “cervecera” no les gusta, por lo que buscan soluciones rápidas y eficaces. Se obtienen buenos resultados con la ultracavitación o la aplicación de un laser especial que actúa como reductor localizado.

-La caída del pelo es otro factor importante (en muchos casos el que más les preocupa) y necesitan soluciones reales eficaces. Como los factores que influyen en la pérdida son variados, no existe una fórmula única de tratamiento. Se utilizan productos específicos anticaída de aplicación local o sistémica para prevenir o mejorar el problema. Cuando la pérdida es mayor, puede resultar necesario practicar un microinjerto (en el que se extrae pelo de la nuca o los laterales y se injerta en la zona en la que se ha perdido) en un centro especializado.