De acuerdo con meteorólogos y psicólogos, el próximo 20 de junio viviremos el "Yellow Day", o lo que es lo mismo, el día más feliz del año. Disfrutaremos de temperaturas agradables, más horas de luz, el comienzo del verano y la proximidad de las vacaciones, sin olvidar la paga extraordinaria. Todas estas variables hacen que este día sea considerado por los expertos como un día en el que somos más felices. Sin embargo, para la coach de liderazgo personal y profesional, Mónica García, ser feliz también depende en gran medida de nosotros, no solo de variables externas, y a través de sus consejos y pequeñas rutinas podemos conseguir crear más estados de felicidad diarios. Se acerca el día más feliz del año: el 20 de junio se celebra el "Yellow Day".

Un día en el que no faltan motivos para sonreír: buenas temperaturas, días más largos, las vacaciones están a la vuelta de la esquina, la paga extra, la jornada laboral intensiva… Es el antítesis al Blue Monday, que este año se celebró el 14 de enero… o el día más triste del año. Y la luz. Este día también destaca por ser el día del año con mayor número de horas de luz… con más de 15 horas en ciudades como Madrid o Barcelona. La luz solar juega un papel muy importante en el ánimo de las personas. Activa la vitamina D y gracias a ella aumenta la generación de cortisol, serotonina y melatonina, hormonas que facilitan una mejora del estado de ánimo y de la predisposición a hacer cosas, a tener más energía y menos sueño.

Sin embargo, ¿por qué conformarnos con vivir solo "un día más feliz del año"? ¿por qué no añadir a nuestra lista de quehaceres "crear un momento de felicidad?" reflexiona Mónica García, coach de liderazgo personal y profesional. Para García, fundadora del centro de innovación y transformación personal El Factor Humano, "la felicidad es tan deseada como escurridiza. Todos hemos sentido en algún momento de nuestras vidas, y muy probablemente en más de un momento, la sensación de felicidad. Que la felicidad existe y es posible no hay duda. Cómo alcanzarla es otra canción". Para la coach, a menudo, cuando hablamos de felicidad hablamos de "alcanzar la felicidad" como si estuviera ahí delante, separada de nosotros y que una vez que se alcanza se tiene para siempre.

Esta forma de pensar nos mantiene en constante búsqueda, separados de la tan deseada felicidad, con la sensación de no tenerla y por lo tanto en diferentes estados de insatisfacción.
Sin embargo, la felicidad es un estado emocional como otro cualquiera, que lo mismo que viene, se va… aunque para la experta sí que podemos aprender a crear más estados de felicidad a lo largo de todo el año. "La felicidad, no es un estado que alcanzar, sino un estado emocional que podemos crear", afirma.