Cómo ahorrar calefacción este invierno en casa

¿Ha llegado frío a tu ciudad y te da pánico utilizar la calefacción? No te preocupes, poniendo en práctica algunos sencillos consejos, podrás disfrutar de un hogar calentito y sin un aumento excesivo en la factura del gas.

Trucos para reducir el consumo de gas en tu hogar

¿Sabías que el gasto energético en tu casa durante los meses de invierno es de más de un 40%? Si quieres evitar que la factura del gas se dispare, toma nota:

Antes de usar la calefacción en casa, es importante que revises tanto la caldera como los radiadores . Si aún no lo has hecho, estás a tiempo. Llama a tu compañía del gas y solicita una revisión de caldera para comprobar que su funcionamiento es el correcto y no gasta más de lo necesario y solicita que te purguen los radiadores para que funcionen al 100%.

Utiliza correctamente el termostato y mantén una temperatura constante en tu hogar. Intenta que durante el día al temperatura esté entre los 19º y 21º y durante la noche, entre los 15º y 17º. Evita así, las subidas bruscas de temperatura que lo único que hacen es aumentar el gasto energético.

Aísla tu hogar con la ayuda de alfombras para mantener el calor de cada estancia y no tener que subir así la temperatura de la calefacción. Las alfombras ayudan a reducir la pérdida de calor en el suelo.

Cuando uses el horno, aprovecha su calor. Este electrodoméstico acumula una temperatura muy elevada en su interior cuando lo usamos. Por ello, es muy práctico para aumentar unos grados la temperatura en nuestra casa, abrir el horno cuando lo hayamos empleado para que el calor se reparta por las estancias más cercanas a la cocina.

No utilices los radiadores como secadora, ya que, si los cubres, haces que aumente su consumo y, por lo tanto, el gasto y la factura.

Mejora el aislamiento de tu casa. Para ello basta con bajar las persianas durante la noche y correr las cortinas para evitar que el frío que desprenden los cristales entre en tu casa.

Durante el día, aprovecha el calor de los rayos del sol. Aprovecha ese momento para ventilar tu hogar. 10 minutos serán suficientes para notar sus efectos y evitar que el piso se enfríe en exceso.

Mantén las puertas de cada habitación cerradas. Con este simple gesto, conseguirás que el calor que genera cada radiador se mantenga atrapado dentro de cada estancia, creando así espacios más acogedores y calentitos.

Evita calentar las habitaciones vacías para no derrochar el consumo. Para ello, cierra la llave de los radiadores del gas en las habitaciones que no utilices.

Es importante que revises tu factura del gas para comprobar que no estás pagando más de lo necesario. Compara precios de diferentes compañías y, si es necesario, cambia de empresa suministradora.

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