El trastorno obsesivo compulsivo (TOC) se caracteriza por la presencia de pensamientos y miedos no deseados (las obsesiones) que provocan comportamientos repetitivos (las compulsiones). Interfieren en las actividades diarias y reducen la calidad de vida de quien las padece.

La obsesión se relaciona con diversos temas como la limpieza. La persona intenta ignorar o detener ese pensamiento, pero lo que logra es aumentar su ansiedad y sufrimiento emocional.

Para reducir ese malestar o evitar que algo malo suceda, siente la necesidad de realizar actos compulsivos (como lavarse repetidamente las manos). Las obsesiones no desaparecen y se repiten los rituales, entrando en un círculo vicioso característico.

Suele incluir tanto obsesiones como compulsiones, pero también es posible tener solo un tipo de síntomas. Es posible no darse cuenta de su presencia a pesar de que ocupan tu tiempo e interfieren en tu rutina diaria y en tu vida.

El trastorno obsesivo compulsivo a menudo se centra en ciertos temas, entre los que destacarían: el miedo a la contaminación o a la suciedad, dudas y dificultades para tolerar la incertidumbre, la necesidad de orden y simetría o pensamientos agobiantes sobre la pérdida de control y el daño a uno mismo o a otros.

Los síntomas de la obsesión son numerosos. Destacaría el miedo a ser contaminado por tocar objetos que otros han tocado (en este momento lo padece un elevado porcentaje de la población debido a la pandemia), las dudas relacionadas con la seguridad (haber cerrado la puerta o apagado la luz o la calefacción) o un elevado nivel de estrés cuando los objetos no están ordenados de una determinada manera.

También es muy frecuente evitar las situaciones que pueden desencadenar las obsesiones, como dar un abrazo o un apretón de manos, que en este momento pasa desapercibido porque lo normal es no hacerlo.

Las compulsiones se relacionan con las obsesiones que pretenden resolver y destacarían el lavado y limpieza, la comprobación, el orden, la rutina y el recuento. Entre los síntomas se incluyen: lavarse las manos hasta afectar a la piel, comprobar reiteradamente las puertas para asegurar que están cerradas, contar, repetir frases u oraciones en silencio,

Los síntomas del TOC suelen empeorar cuando se experimenta un mayor estrés debido a diferentes eventos vitales, por lo que debe tenerse en cuenta para su evaluación y tratamiento.

También pueden cambiar con el paso del tiempo los tipos de obsesiones y compulsiones que experimenta el paciente. No es extraño que sientan a la vez una obsesión de limpieza y orden de los objetos o que se presente en primer lugar una y, posteriormente, otra.

Analiza tu situación personal y comprueba si tus obsesiones y compulsiones afectan a tu bienestar y calidad de vida. Si percibes que son ellas las que te controlan consulta a tu médico o a un psicólogo.