¿Quién no ha usado una cámara de usar y tirar alguna vez en la vida? Y es que estas pequeñas y compactas cámaras analógicas nos acompañaban durante nuestros día a día, incluso cuando íbamos de viaje. Este artículo vintage de la década de los 90 está causando sensaciones sobre todo ...
¿Quién no ha usado una cámara de usar y tirar alguna vez en la vida? Y es que estas pequeñas y compactas cámaras analógicas nos acompañaban durante nuestros día a día, incluso cuando íbamos de viaje. Este artículo vintage de la década de los 90 está causando sensaciones sobre todo entre los más jóvenes, los de la Generación Z, que ven en estos aparatos una forma de realizar tomas espontáneas, dejando la inmediatez a un lado, y manteniendo la expectación de cómo será el resultado final hasta que el carrete se revela. No hay opción de volver atrás, como en los móviles inteligentes, la fotografía que hagas es la que se queda, no hay lugar para descartar o sacar varias versiones.
Son sencillas de manejar, no se necesita experiencia alguna y admiten un sólo uso. Primero, avanza la rueda de desplazamiento hacia la derecha antes de comenzar a usarla. Enciende el flash, si tu cámara cuenta con él. Coloca el visor a la altura del ojo, apunta al objetivo y haz clic en el botón para capturar la toma. Después, gira la rueda de desplazamiento y ya estará lista para la siguiente foto. Se pueden llevar a cualquier parte gracias a su diseño compacto y ligero. Otro de los factores a tener en cuenta es que son económicas, las hay con flash o sin él, varía también el número de instantáneas y el ISO, así como también su uso, si es para exterior, interior o ambos. También podrás encontrarlas en formato pack. Pero ninguna tendrá zoom.
Para las apasionadas del mundo acuático son recomendables las desechables impermeables, pudiendo sumergirlas hasta 10 o 15 metros. Y si lo tuyo es la fotografía en blanco y negro, no te preocupes, ya que existe también la versión desechable bicolor. Aunque si no lo ves claro, siempre puedes echar mano de aplicaciones como Dispo, una aplicación que convierte tu móvil en una cámara de usar y tirar, en la que tendrás que esperar hasta el día siguiente para saber cómo ha quedado tu sesión fotográfica, tal y como pasaba con las cámaras anteriores. Cuando las tomas estén listas recibirás una notificación para visualizarlas. Ben Leavitt explica detalladamente en su canal cómo funciona esta nueva herramienta digital que simula una cámara analógica. Esta ha sido creada de la mano del youtuber estadounidense David Dobrik. Está disponible para su descarga gratuita tanto en Android como en iOs.
FOTO PRINCIPAL.: Photo by Alberico Bartoccini on Unsplash.
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