La llegada del calor puede provocar una mala circulación sanguínea. Tendemos a retener líquidos y nos sentimos más pesados e hinchados. Ésto puede producirse, sin duda, en algunas épocas de nuestra vida como pueden ser el embarazo o llevar una vida sedentaria pero, sin duda, la subida de temperaturas hace que nuestras venas se dilaten y le cueste mucho más a la sangre llegar a cada rincón de nuestro cuerpo.

Síntomas de una mala circulación sanguínea
La mala circulación de nuestro cuerpo nos afecta mucho antes de que aparezcan signos exteriores visibles. Un cansancio excesivo, dolor en brazos y piernas y pinchazos son los primeros síntomas que nos dicen que algo no va bien. Cuando la mala circulación se hace evidente lo hace en forma de:

1. Varices: La mala circulación hace que se hinchen las venas y esta hinchazón aparece en nuestras piernas sobre todo, en forma de varices.
2. Piernas hinchadas: Retenemos más líquido de lo normal y aumenta nuestro volumen corporal.
3. Arañas vasculares: Son de un color rijizo y tiene forma de telearaña. No tienen relieve pero sí son visibles.
4. Hormigueos y calambres: La aparición de éstos síntomas no son buena señal.
5. Cambio de color en las uñas de los pies: Si tenemos una mala circulación, el color de nuestras uñas puede cambiar hacia tonos azules o violetas debido a la falta de oxígeno por la mala circulación.
6. Falta de reflejos: Nuestro organismo no se oxigena correctamente, por lo tanto estamos más pesados de lo habitual y menos rápidos de reflejos.
7. Cambios en la temperatura corporal: La mala circulación provoca tener los pies más fríos o más calientes de lo normal porque la sangre no llega correctamente a las extremidades, o bien, porque no retorna de la manera adecuada.

¿Qué activos naturales pueden ayudarnos a mejorar nuestra circulación?

• Las pipas de girasol: Aportan aminoácidos ideales para mantener las estructuras capilares. De hecho son uno de los antioxidantes más potentes del cuerpo.
• El ajo: El ajo es un anticoagulante natural que ayuda a una mejor circulación de la sangre. Además, disminuye la viscosidad de las sangre.
• El jengibre: Fluidifica la sangre y estimula la circulación. Ideal para acompañar ensaladas y zumos.
• La cúrcuma: La cúrcuma es un ingrediente que no debe faltar en nuestra despensa ya que es antiinflamatoria y antioxidante.

Además, hay una serie de hábitos que también pueden ayudarte como pueden ser ducharte con agua fría, masajear las piernas diariamente con un guante de crin o intentar poner las piernas en alto siempre que puedas.