¿Qué son las agujetas?
Las agujetas son la respuesta de nuestros músculos ante la práctica de un ejercicio intenso cuando no estamos acostumbrados. No es algo grave, pero sí que pueden llegar a ser muy molestas. Este dolor muscular que suele aparecer a las 24 o 48 horas después de hacer actividad física, se produce como resultado de la inflamación y microroturas de las fibras musculares tras realizar ejercicio intenso.

Cómo evitar que aparezcan
Lo mejor para intentar aliviar el dolor de las agujetas es prevenirlas. Aunque, en muchas ocasiones esto es muy difícil, hay algunas directrices que nos pueden ayudar a que aparezcan en menor intensidad. Una de las premisas principales para evitar que aparezcan agujetas es hacer un calentamiento previo lo suficientemente completo para activar los músculos. Movilizando las articulaciones antes de entrenar los músculos se irán adaptando a la fuerza que ejercemos sobre ellos. Otro consejo básico para evitar las agujetas es realizar la actividad de forma progresiva y no pasar de 0 a 100 de forma repentina. Estirar es otra práctica básica para ayudar a que los músculos vuelvan a la normalidad y mejorar la recuperación muscular. Finalmente, es importante que en tu rutina de ejercicios apliques la regla del 10, es decir, que inicies nuevos ejercicios poco a poco aumentando el tiempo y la intensidad un 10% cada semana hasta conseguir que el cuerpo se adapte completamente.

Qué hacer para aliviar las agujetas
Aunque no se conoce ningún método milagroso que haga desaparecer de forma milagrosa las agujetas, existen algunos trucos que pueden ayudarnos a aliviar los síntomas. Algunos de ellos son:

Aplicar bolsas de hielo sobre la zona dolorida. Para evitar la inflamación, el frío es nuestro mejor aliado y calma de forma inmediata. Lo ideal es utilizar una bolsa de agua fría o unos cubitos de hielo envueltos en una tela o bolsa.

Utilizar para masajear aceite de oliva y de lavanda. Estos aceites funcionan de forma excepcional para aliviar la tensión muscular y el dolor de las fibras rotas. ¿Cómo aplicarlo? Coge un paño de lino, vierte una cucharada de aceite sobre él y realiza después un suave masaje sobre la zona dolorida. Finalmente, un poquito de aceite de lavanda relajará aún más la zona. Retira el aceite con un baño de agua tibia para así estabilizar los músculos.

Beber agua con limón y azúcar. Un vasito de agua con limón y azúcar ayuda a reducir el dolor. Cuando más frío esté el líquido (también puede ser leche) mucho mejor. Esta mezcla es ideal para aligerar los dolores musculares y la circulación de la sangre en las fibras.

Si tienes agujetas debes evitar…
Si después de hacer ejercicio sufres de las molestas agujetas, hay algunas cosas importantes que debes evitar.

• Cambiar de rutinaEs importante que acostumbres a tu cuerpo a la misma rutina de ejercicios. Si vas cambiando y trabajando músculos distintos de forma aleatoria, estos no se acabaran de acostumbrar. Intenta repetir rutinas de forma periódica.

• Movimientos extremos Si sufres de agujetas, no fuerces ni hagas deportes de impacto. Realiza movimientos básicos y no fuerces.
• No hacer ejercicio A pesar de que parezca lo contrario, lo peor que puedes hacer cuando sufres de agujetas es estar inactivo. Aunque te duelan todos los músculos de tu cuerpo, debes moverte, ya que así, el efecto se irá antes que si estás relajado e inactivo. De hecho, si paras el dolor se intensificará. Eso sí, apuesta por un ejercicio ligero con el que estires los músculos y no sea de un impacto excesivo.