Primeros pasos para disfrutar de un esnórquel seguro

Merce Rey  

Este año proponte una nueva meta cuando vayas a la playa, además de nadar, tomar el sol o pasear por la arena, adéntrate en el agua y contempla el fondo marino desde la superficie. Para ello, deberás de llevar el material adecuado y elegir una buena compañía.

17/08/2021

Se trata de un deporte subacuático que suele tener bastante aceptación en verano porque permite estar en contacto con las especies y plantas marinas desde otra perspectiva a la que estamos acostumbradas visualizándolas con total claridad. Aunque para ponerla en práctica conviene hacerse antes con el material adecuado. No hace ...

Se trata de un deporte subacuático que suele tener bastante aceptación en verano porque permite estar en contacto con las especies y plantas marinas desde otra perspectiva a la que estamos acostumbradas visualizándolas con total claridad. Aunque para ponerla en práctica conviene hacerse antes con el material adecuado. No hace falta asistir a ningún tipo de curso para su iniciación, pero sí existen una serie de pautas que hay que tener en consideración antes de sumergirse en el mar. Debes elegir una playa de aguas cristalinas que no sea de fuerte oleaje para que te permita ver lo que hay en el fondo. Sin ir más lejos, en España hay infinidad de calitas donde poder experimentar esta vivencia, así no tendrás que estar pendiente de las mareas ni de si te lleva la corriente.

Esta actividad es ideal para ser compartida en familia o entre amigos, así siempre tendrás a alguien cerca en caso de necesitarlo. Pero, ¿qué accesorios hay que conseguir exactamente para practicarla? Tan sólo hay que hacerse con tres: las gafas, el tubo y las aletas. Así, las gafas o también llamadas máscaras de esnórquel deben de ser cómodas, resistentes, y fácilmente ajustables. Las encontrarás monoculares o binoculares, compuestas por un cristal o por dos, la principal diferencia entre una u otra es el campo de visión que ofrecen y algunas hasta se pueden graduar. Lo importante es que el modelo que elijas encaje a la perfección con la forma de tu cara para evitar que el agua no se filtre dentro ni los cristales se empañen, comprueba también que no te lastimen en la nariz al probártelas. Otro de los artículos necesarios es el tubo, gracias a él podrás respirar cuando estés sumergida bajo el mar, los hay desde los más sencillos hasta aquellos más sofisticados. Algunas referencias traen incorporadas una válvula en el mismo para poder evacuar el agua si se necesita, otros en cambio son capaces de bloquear la entrada de agua durante la inmersión. Por último, las aletas también son importantes, ya que te permitirán desplazarte durante la práctica de una forma más sencilla y rápida. Tienen que ser de un tamaño inferior a las que se utilizan para buceo y deben ser flexibles.

Esnórquel y buceo, ¿cuáles son las diferencias?

Como ya has visto en el caso del primero existe una toma de contacto más superficial con el agua, no hace falta sumergirse del todo en ella para practicarlo, ya que la cabeza no está al completo bajo el agua y el tubo quedará por fuera de ella en su mayor parte. En el buceo esto no ocurre, puesto que el cuerpo está completamente inmerso en la misma, descenderás mucho más abajo. Esto es posible porque llevas un equipo mucho más experimentado con traje de neopreno, regulador y botella de oxígeno, aletas, pesas, máscara, entre otros. Debes acudir a un centro especializado para que te instruya antes de comenzar a practicar submarinismo.

Al agua patos

Una vez seleccionado el equipo idóneo, toca entrenar un poco con él antes de aventurarse en el esnórquel. Debes aprender a respirar y a nadar con el puesto. En el vídeo de Sikana ES ofrecen tres pequeños consejos para que tu primera toma de contacto con este deporte subacuático sea un éxito. El primer paso tiene que ver con la colocación de las gafas, ayúdate de la cinta para ajustarlas, conviene no apretarlas demasiado, y en tutorial recomiendan además colocar un poco de saliva en los cristales antes de tirarse al agua para que no se empañen. El tubo deberá colocarse de forma vertical. Con respecto a la respiración, deberás inspirar y expirar por la boca varias veces fuera del agua. A continuación, sumérgete sobre el vientre y comienza a respirar. Seguidamente en posición ventral, tal y como señalan en este canal, desplázate haciendo movimientos de pies y de manos. En el caso de querer bucear, inspira profundamente por la boca manteniendo la respiración. Una vez que te incorpores en la superficie, sopla fuerte en el tubo para expulsar el agua y luego respira normal.

FOTO PRINCIPAL.: Photo by Patrick Jansen on Unsplash.

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