El rebozado es una técnica culinaria que hace, en muchos casos, más atractivos nuestros platos. Gracias al rebozado, conseguiremos productos mucho más sabrosos y esponjosos y es ideal para conseguir introducir algunos alimentos en el menú diario de los más pequeños. Cuando rebozamos es primordial escoger los mejores ingredientes para ...
El rebozado es una técnica culinaria que hace, en muchos casos, más atractivos nuestros platos. Gracias al rebozado, conseguiremos productos mucho más sabrosos y esponjosos y es ideal para conseguir introducir algunos alimentos en el menú diario de los más pequeños.
Cuando rebozamos es primordial escoger los mejores ingredientes para que el resultado final sea el que deseamos. Cuando rebozamos protegemos el producto que vamos a cocinar, ya que al recubrirlo evitamos que el calor del aceite lo seque, pero permite que la temperatura penetre para que lo deje gustoso y bien hecho.
Aunque rebozar lo hemos hecho todas alguna que otra vez, es cierto, que cuesta conseguir que queda lo suficientemente crujiente o dorado cuando así lo deseamos, o meloso y gustoso en otra ocasiones. Muchas veces lo dejamos al azar, sin saber realmente que con un par de truquitos es suficiente.
Estilo andaluz: Parta elaborar este tipo de rebozado solo necesitamos harina y que el aceite bien caliente. Se suele utilizar, sobre todo, para piezas pequeñas de pescado.
Tempura: Este tipo de rebozado importado de Japón es muy famoso ya en Occidente. Para conseguir una tempura perfecta necesitas, harina, agua bien fría y huevo. Es ideal para rebozar verduras.
Rebozado tipo chips and fish: Es un tipo de rebozado muy popular, sobre todo en Inglaterra. Para elaborarlo solamente necesitamos harina, huevo y cerveza (también podemos cambiar la cerveza por agua con gas).
Uno de los ingredientes claves a la hora de rebozar es el aceite. Escoger uno de calidad condicionará, sin duda, nuestro rebozado final.
Si queremos rebozar pescado, opta por rebozar piezas pequeñas para evitar que, al poner en la sartén el producto baje la temperatura y ablande el rebozado.
Si queremos un rebozado crujiente, debemos olvidarnos del huevo. Si queremos un rebozado estilo andaluz basta con impregnar en harina el producto que queremos rebozar, sin más.
Retira toda humedad que puedas ante de pasar por el rebozado la carne o el pescado con la ayuda de un papel de cocina. Cuando más humedad menos crujiente será el resultado final.
Si quieres rebozar en tempura no mezcles demasiado los ingredientes y utiliza siempre agua bien fría
El aceite para rebozar siempre tiene que ser limpio. No sirve rebozar con el mismo con el que has frito antes el mismo producto porque cambiará el sabor final de rebozado.
Cuando acabes de rebozar y freír, deja siempre la carne o el pescado en un plato con papel de cocina. Es importante, eliminar toda la grasa sobrante para evitar que el rebozado se humedezca.
Puedes usar harina y pan rallado mezclados para conseguir un rebozado más compacto.
Deja volar tu imaginación y atrévete con productos crujientes para rebozar como pueden ser los frutos secos, cereales, tortitas de maíz bien picadas…
Evita que el aceite se queme.
¿Quieres escuchar nuestros podcast ? Únete a nuestra comunidad y sumérgete en un mundo de inspiración y empoderamiento para la mujer moderna.
Las últimas tendencias en salud, maternidad, viajes, cultura y feminismo en nuestra revista.
Acceso a noticias y newsletters exclusivas
Descarga de materiales únicos, como webinars, podcasts o vídeos
¿Te lo vas a perder?
Acceder