Cuando acudas a la consulta, el médico te hará numerosas preguntas a las que quizás no encuentres sentido, pero lo tiene. Intenta ayudarte a expresar todo lo que necesites comentar y buscar soluciones adecuadas compartidas. Tu actitud ante un problema psicológico es fundamental para lograr una recuperación completa. Sería recomendable: 1-Buscar información ...
Cuando acudas a la consulta, el médico te hará numerosas preguntas a las que quizás no encuentres sentido, pero lo tiene. Intenta ayudarte a expresar todo lo que necesites comentar y buscar soluciones adecuadas compartidas.
Tu actitud ante un problema psicológico es fundamental para lograr una recuperación completa. Sería recomendable:
1-Buscar información sobre tu problema.
Tu médico o tu psicólogo pueden explicarte lo que está sucediendo o darte las recomendaciones que precises. Cuenta con tu familia e infórmales para que su ayuda resulte más eficaz.
2-Cumplir con el tratamiento.
No debes faltar a las sesiones de terapia pautadas. Tampoco puedes dejar el tratamiento farmacológico, aunque creas que los síntomas mejoran. Si retiras inadecuadamente los medicamentos, los síntomas reaparecerán (incluso incrementados) y sentirás algo similar a la abstinencia. Cualquier efecto secundario debes comunicarlo al médico para que pueda modificar lo que considere oportuno.
3-Decidir lo que sea importante cuando te encuentres bien.
No tomes decisiones importantes en momentos en los que los síntomas están presentes porque carecerás de la claridad necesaria para hacerlo.
4-Detectar tus prioridades reales.
No todo es siempre obligatorio, necesario o urgente. Necesitas establecer objetivos razonables, especialmente cuando los síntomas te afectan directamente. Elabora una agenda para organizar tu tiempo y no consumir la energía que necesitas para recuperarte.
5-Elegir la actitud positiva.
Piensa en todo lo positivo que tienes en tu vida para mejorar a todos los niveles. Aprende a aceptar los cambios y no magnifiques los problemas. Practicar técnicas de relajación, puede ayudarte a conseguirlo.
6-Evitar el consumo de alcohol y drogas.
Ambas sustancias interfieren en el tratamiento de la enfermedad mental. Consulta al médico las opciones existentes si eres incapaz de dejarlo sin ayuda.
7-No perder el contacto con tus amigos y familiares.
Es posible que no te apetezca, pero te ayudará a recuperarte. Procura participar en actividades sociales gratificantes y pasar tiempo con amigos y familiares.
8-Participar en los grupos de apoyo.
Ponerte en contacto con personas que estén viviendo algo similar a ti puede servirte de ayuda. Existen numerosos grupos de apoyo para personas con enfermedades mentales y sus familiares con los que es posible establecer un contacto positivo y de colaboración mutua.
9-Pedir ayuda.
No lo veas como un signo de debilidad; es una señal de inteligencia.
10-Seguir hábitos saludables.
Mantener un horario regular de sueño, disfrutar de una alimentación saludable y realizar actividad física a diario mejorará tu salud mental.
11-Vivir activo.
El sedentarismo es malo para todo, también a nivel psicológico. Practicar ejercicio puede ayudarte a disfrutar de una mayor calidad de vida y controlar algunos síntomas que acompañan al problema psicológico. Cualquier opción es válida. Caminar por un lugar agradable, bailar o nadar, por ejemplo, resultan muy gratificantes.
¿Quieres escuchar nuestros podcast ? Únete a nuestra comunidad y sumérgete en un mundo de inspiración y empoderamiento para la mujer moderna.
Las últimas tendencias en salud, maternidad, viajes, cultura y feminismo en nuestra revista.
Acceso a noticias y newsletters exclusivas
Descarga de materiales únicos, como webinars, podcasts o vídeos
¿Te lo vas a perder?
Acceder