De color amarillo intenso, la cúrcuma proviene de la raíz naranja de una planta herbácea que procede de la India e Indonesia, y cuenta con una amplia tradición histórica. De hecho, sus primeros usos se remontan al año 610 a.C., ya que se empleaba como colorante para la lana, y más tarde, se utilizó en la gastronomía hindú como colorante alimentario, pues forma parte del famoso curry. Por lo que respecta a sus compuestos cabe destacar los denominados curcuminoides, es decir, la curcumina, la demetoxicurcumina y la bisdemetoxicurcumina, que son la base de los ingredientes que le otorgan esas propiedades medicinales tan conocidas. Asimismo, contiene proteínas, azúcares, fibra dietética, vitaminas C, E y K, sodio, calcio, potasio, cobre, magnesio, hierro y zinc, entre otros minerales y compuestos.

Por otro lado, la cúrcuma destaca por ser considerada un "bálsamo general" para nuestra salud, ya que se le han reconocido beneficios antiinflamatorios, antioxidantes, digestivos, hepatoprotectores, desintoxicantes a nivel hepático, antiulcerosos y cardioprotectores. De tal manera que nuestro hígado, sistema digestivo y sistema inmunitario, nuestro corazón y nuestra piel son los órganos que más se benefician de las bondades de esta especia. Tanto es así, que se le atribuye un efecto rejuvenecedor de la piel, ya que ayuda a eliminar toxinas y a mantener la piel sana y libre de impurezas.

También es ideal asimilada en la dieta, pues resulta realmente útil para ayudar a perder peso, gracias a su facilidad para movilizar las grasas y metabolizarlas, limitando la extensión del tejido graso e inhibiendo el crecimiento de nuevos vasos sanguíneos, por lo que es muy aconsejable incluirla en tratamientos de adelgazamiento.

Principales beneficios

Aparte de todo lo que hemos mencionado a lo largo de este post, vamos a enumerar otra serie de principales beneficios para la salud:

- Alivia el malestar estomacal: remedio natural muy efectivo para el dolor de estómago, ya que sus propiedades antiinflamatorias ayudan a prevenir la acidez y calmar el ardor de estómago. Por otro lado, sus principios activos favorecen la producción de jugos gástricos y pancreáticos, lo que ayuda a su vez a equilibrar el pH de estos órganos.

- Potente antiinflamatorio: los curcuminoides que contiene esta especia le otorgan grandes propiedades antiinflamatorias, por lo que resulta casi tan efectivo como algunos medicamentos antiinflamatorios. De hecho, es ideal para aquellas personas que son aléricos o no toleran los medicamentos antiinflamatorios.

- Ayuda a los trastornos hepáticos: excelente tónico biliar, gracias, en gran parte, a la curcumina, el resto de sus componentes hepatoprotectores sirven como coadyuvantes para eliminar piedras en la vesícula biliar y favorecer el drenaje hepático.

- Antidepresivo natural: la milenaria medicina tradicional china usa esta especia para tratar la depresión, la tristeza y la infelicidad, además de que la cúrcuma en polvo estimula el sistema nervioso, a la vez que despierta el estado de ánimo. Asimismo, es muy recomendada para reducir los niveles de estrés, al producir un aumento de serotonina.

- Protege de las enfermedades cardiovasculares: gracias a sus propiedades cardioprotectoras, la cúrcuma previene el riesgo de padecer enfermedades cardíacas. También sirve para reducir el colesterol malo y los triglicéridos, para lo cual se recomienda condimentar los alimentos con cúrcuma para prevenir este tipo de enfermedades de manera natural.