Si bien es cierto que las melenas XXL siguen estando entre nosotros, aunque poco a poco estén dejando de robar todo el protagonismo, son los cortes por encima del hombro los que están arrasando en los últimos tiempos.

Una de las frases más sonadas es esa de "toca sanear las puntas". El cuidado personal, entre lo que se encuentra aquel en clave beauty donde el cabello juega un papel fundamental es, cada vez, una mayor preocupación entre la población.

"Cual sea el corte que lleves, es indispensable cortar las puntas regularmente para preservar la salud de tus cabellos. Todavía más si tienes una melena XXL, porque las extremidades envejecen con el tiempo y se dañan más fácilmente" – Ana Martínez, Education Manager de Jean Louis David.

Mantener el pelo sano e hidratado es fundamental independientemente de tu largura, color o textura, pero, ¿sabes qué beneficios reales tiene cortar el cabello?

Ana Martínez confirma eso de que "para conservar tu melena en plena salud, potenciar el crecimiento o cambiar de color, un retoque en el corte siempre es bienvenido". Ahora bien, entre los beneficios de hacerlo de manera regular asegura que está el de "reflejar una fibra capilar sana y resistente".

Pero, ¿cada cuánto es adecuado recurrir al corte para mantener el cabello en buen estado dependiendo de tus necesidades? El ritmo de visita al salón habitual es de 6 semanas de media para cabellos cortos y cada 4 meses para melenazas. Sin embargo, es en función del tipo de cabello y de sus necesidades lo que determinará cuándo debes recurrir a ello.

Un retoque puntual para dinamizar el crecimiento

Si cortar las puntas no hace crecer los cabellos más rápido, contrariamente a lo que se dice, "un corte, aunque sea poco, permite ganar centímetros más fácilmente sobre las puntas abiertas que frenan el crecimiento". En este caso, y para estar segura de tener una melena que prospera, "debes cortarte a cada 2 a 3 meses para no dejarle tiempo de dañarse y ralentizar el proceso de crecimiento" – Ana Martínez.

De sanear las puntas a optar por un cambio radical

Cuando debes cortarte para un cambio de color, tu estilista vuelve a colorear el conjunto del cabello y elimina después las partes de las mechas con la coloración antigua, que a veces permanecen. Para ello, "debes cortarte cada 1 o 2 meses para eliminar esas partes lo antes posible" – asegura la experta.

Otra opción es "un corte radical ultra corto cuando ya tengas raíces suficientemente grandes, así solo quedara hacer un nuevo color".

Complementarlo con el tratamiento adecuado

Si a pesar de los tratamientos, tus puntas siguen resecadas, ásperas hasta el punto de desdoblarse, "deberás programar una visita para parar con ese proceso. Cortar las puntas abiertas a tiempo permite evitar que suban hasta los medios largos" – Ana Martínez, Education Manager de Jean Louis David.