Si te preocupa tu peso y quieres evitar acumular calorías, lo mejor es que evites el consumo de alimentos excesivamente grasos o hipercalóricos, especialmente en el momento del aperitivo. No es recomendable consumir:

-Aperitivos salados en sus diferentes modalidades que contienen mucha sal y grasas. Resultan muy apetecibles y cómodos, pero no constituyen la mejor elección por su composición y contenido calórico.

-Galletas saladas. Ya sea solas o como acompañamiento de otros alimentos (quesos, embutidos, patés, etc.) que incrementan el número de calorías ingeridas. Si decides comerlas, mejor las que contienen fibra y poca sal.

-Frutos secos salados y tostados. Son mucho más sanos al natural, así que no los consumas con sal.

-Patatas fritas. No son malas en sí mismas, pero contienen aceite y sal que no resultan adecuados. Si no puedes resistirte, elígelas sin sal.

-Palomitas de maíz. Es un capricho “natural” pero contiene sal, mantequilla, aceite… además, resultan indigestas para muchos consumidores. Evítalas.

Aunque hayamos descartado los aperitivos más convencionales y apetecibles, quedan muchas opciones sanas que son también agradables. Si puedes elegir, resultan más indicados:

-Alimentos bajos en hidratos de carbono como champiñones o calabacín. Rehogados con ajo y aceite o en brochetas con gambas y orégano son deliciosos y muy equilibrados.

-Tomate o verdura (zanahoria, apio, etc.). Consumidos en crudo aportan fibra que controla las variaciones de azúcar, ya que se absorbe más lentamente y dan sensación de saciedad.

-Cebolletas y pepinillos en vinagre. Los encurtidos constituyen una opción muy sencilla y agradable que contienen fibra y minerales. Si no te gusta el sabor ácido del vinagre, puedes introducirlos en agua una o dos horas antes para reducir su fuerza.

-Huevos rellenos con atún y tomate. Son fáciles de preparar y los puedes mantener en la nevera hasta el momento de consumirlos. Puedes añadir cebolla picada, pepinillos, tomate, apio, etc.

-Alimentos ricos en omega-3 como mejillones, camarones o pescados azules (anchoas, sardinillas, etc.) que cuidan tu corazón debido a su composición nutricional. Además aportan proteínas y minerales de gran interés para tu salud.

-Almendras y pistachos naturales que aportan nutrientes y son saciantes, por lo que no tendrás que comer una gran cantidad. También resultan relajantes y te entretienen.

Existen muchas posibilidades a tu alcance y tu imaginación puede actuar. Combina alimentos poco calóricos y organiza lo que desees. Si te gustan las mezclas de dulce y salado, puedes preparar brochetas de: uvas con queso, melón con jamón, salmón con cebolla confitada, etc. Como ves, son muchas las opciones que pueden formar parte de tu aperitivo. Si te preocupa tu figura, puedes disfrutar del aperitivo y eliminar el primer plato o el postre para equilibrar la ingesta.