Mindfulness es un concepto que está íntimamente ligado con la meditación y el conocimiento de las emociones. Podemos definirlo como la capacidad de disfrutar y vivir el momento presente sin interferencias o preocupaciones, llevando nuestra mente a un estado de plenitud con los actos que estamos realizando en cada momento.

El presente toma un papel importante, nuestra atención ha de ser plena ante las emociones de los hechos actuales que realizamos, disfrutando de sus matices y detalles, eliminando cualquier otro sentimiento ajeno a ese momento. De este modo, la mente se sitúa en un sólo lugar, favoreciendo la consciencia de las sensaciones y movimientos que se van desarrollando.

En definitiva Mindfulness es disfrutar de las emociones plenas en cada momento. Una modalidad de meditación continúa para cada acto realizado; aprender a conectar nuestra mente en el momento actual, evitando divagar en pensamientos que nos alejen mentalmente del presente, proyectando todo nuestro ser en lo que hacemos.

Vamos a exponer un ejemplo de la práctica del Mindfulness en la rutina diaria de nuestras vidas: el simple acto de ducharnos. En ocasiones, se convierte en una acción que realizamos a velocidad de vértigo, sin tener un mínimo cuidado con lo que hacemos. El Mindfulness nos lleva este hábito a otra dimensión, en primer lugar, nos ayuda a tomar conciencia de lo que hacemos, nos permite olvidar los problemas y las obligaciones del día, sentir la relajada sensación del agua, la temperatura, la fuerza, etc. Esta práctica nos ayuda a disfrutar del oasis de paz que creamos al ducharnos, tomarnos nuestro tiempo para cuidarnos y revitalizarnos con la ducha. Reparar en nosotros mismos sin que nada del exterior enturbie la concentración en lo que hacemos. De esta manera, controlamos la mente en un solo escenario, captando las emociones de forma directa siendo dueños de nuestro interior.

La práctica continuada del Mindfulness es beneficiosa para potenciar una actitud relajada, ayuda a entender nuestros pensamientos, evitando la crítica, siendo fieles a lo que somos. Además, refuerza nuestro interior en el presente, elimina la dispersión y neutralidad de la mente, centrando los pensamientos en un orden lógico de actuación y evaluación.