Con una pantalla de 0,96 pulgadas y capacidad para mostrar más de 65.000 colores, dispone de un botón táctil que permite interactuar con una interfaz de usuario muy simplificada.

Además, permite cambiar el estilo de lo que se muestra en pantalla, incluyendo el texto y el fondo, desde la app móvil Realme Link, que es la que se instala en el teléfono y permite controlar todos los aspectos de la banda de fitness. También podemos elegir el color de la correa, de entre tonos como el negro, el verde caqui, o un amarillo subido de tono.

En cuanto a sus funcionalidades, soporta nueve modos de deporte: caminar (paseo), correr, ciclismo, senderismo, yoga, spinning, fitness, escalada y cricket. Aunque no disponga de un modo específico para natación u otros deportes acuáticos, disfruta de protección IP68, lo que significa que podemos sumergirla, aunque desde la marca explican que solamente "de forma ocasional".

Dicha protección IP68 está más pensada para soportar la lluvia, la entrada de polvo y las condiciones ambientales.

Como sensores, dispone de monitor de frecuencia cardíaca PPG que funciona realizando la medición cada cinco minutos, y que se utiliza para analizar de forma inteligente la calidad del sueño.

También monitoriza nuestra actividad, pudiendo avisarnos de cuándo es recomendable hidratarnos o levantarnos de nuestro sitio de trabajo para mover un poco las piernas.

Obviamente, también nos proporciona las notificaciones de las aplicaciones instaladas en nuestro smartphone, como son WhatsApp o Instagram entre otras.

Toda esta información se gestiona mediante la app móvil Realme Link antes indicada, que deberemos instalar en nuestro smartphone.

Para la carga, la Realme Band simplifica mucho las cosas, pues solamente deberemos desmontarla de uno de sus lados para conectarla a un puerto USB convencional, como cualquiera de los que encontramos en un ordenador, por lo que no necesita de ningún cable de carga específico.

Cuenta con un diseño ergonómico y un peso de solamente 20 gramos, de manera que se adapta perfectamente a la muñeca y no resulta incómoda de llevar.

Finalmente, con este dispositivo es también posible desbloquear un terminal smartphone con solamente acercarle la pulsera, y gracias a la funcionalidad Android Smart Lock. Su precio es 24,99 €.