"Su prevalencia en mujeres es del 64% y en varones del 37%", según datos de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG). Esta sensación de malestar suele agravarse tras estar durante un espacio de tiempo prolongado tanto de pie como sentada, o si hace mucho calor, llegando ...
"Su prevalencia en mujeres es del 64% y en varones del 37%", según datos de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG). Esta sensación de malestar suele agravarse tras estar durante un espacio de tiempo prolongado tanto de pie como sentada, o si hace mucho calor, llegando incluso a hincharse las piernas y los tobillos. Entre sus manifestaciones clínicas destacan la de pesadez de piernas pesadez de piernas (55%), varículas (52%), hinchazón (39%), dolor (37%), varices (34%), calambres (32%), parestesias (28%) y úlcera varicosa (3%), tal y como revelan desde SEMG.
Si trabajas de cara el ordenador durante una jornada prolongada lo ideal sería que te levantases y caminases por la habitación para activar la circulación de las piernas. Otro de los trucos que funciona bastante bien es poner las piernas en alto. Para ello, siéntate en el sofá o en una silla, e intenta elevarlas con un cojín debajo, entre unos 15 y 25 cm. Tampoco es bueno utilizar ropa muy apretada, es mejor decantarse por aquellas prendas que no opriman la transición de la sangre por las venas. Y olvídate del calzado muy ajustado.
Lo importante es que mantengas una dieta equilibrada, prescindiendo de las grasas saturadas y del exceso de sal. Asimismo, otro de los consejos pasa por dar baños de agua fría en las piernas para activar la circulación. Estas recomendaciones junto con la práctica regular de ejercicio también pueden ser beneficiosa para aliviar los síntomas.
Aquí va el primero: flexo extensión de tobillo. Túmbate boca arriba sobre una esterilla con el cuerpo completamente estirado, flexiona y extiende los tobillos. Repite este proceso durante unos minutos. Continúa en la posición inicial para el segundo de los ejercicios. La circunducción de tobillo, que consiste en hacer círculos con los tobillos hacia dentro y luego cambia el sentido hacia fuera. Repite la serie.
Para el tercero. Sitúa las manos debajo de la pelvis y flexiona las rodillas para realizar "pedalear" de forma imaginaria. Primero en un sentido (por ejemplo, hacia delante) y luego realiza un cambio de sentido (hacia atrás). Para el siguiente ejercicio, coloca tus manos debajo del hueso sacro y realiza un movimiento de tijera. Para ello eleva las piernas y crúzalas. Haz 10 movimientos y descansa para volver a repetirlo de nuevo.
Ahora deja la esterilla y ponte de pie. Camina de puntillas para activar el músculo sóleo y el gemelo. Para el siguiente, colócate al lado de una columna y mantente de puntillas con las piernas estiradas, mientras te apoyas con las palmas de las manos en la pared. Seguidamente, subes los talones quedándote de puntillas y te mantienes en esa posición durante tres segundos. Vuelves al inicio y repites.
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