Los churros estÃ¡n de moda

Maribel Martínez

Comaxurros actualiza este producto tan tradicional y lo convierte en una creación gourmet que ofrecen rellenos de sabores muy diversos... ¡e incluso salados!

14/10/2014

Algo tan castizo y tradicional como comer una docena de churros puede convertirse en una experiencia de gastronomía gourmet. Esto es lo que sucede en Comaxurros, una “churrería que revisa la tradición con el objetivo de servir un producto buenísimo, innovador y sorprendente. Así describen su negocio Lluís Estrada y ...

Algo tan castizo y tradicional como comer una docena de churros puede convertirse en una experiencia de gastronomía gourmet. Esto es lo que sucede en Comaxurros, una “churrería que revisa la tradición con el objetivo de servir un producto buenísimo, innovador y sorprendente. Así describen su negocio Lluís Estrada y Marc Muñoz, dos jóvenes maestros en el arte de las masas fritas que aprovecharon que se quedaba vacío un local al lado de la pastelería Canal, propiedad de la familia de Lluís desde hace varias décadas, para crear el espacio soñado en el que dar rienda suelta a su imaginación y reinventar los churros.

Antes de lanzarse al negocio, realizaron una investigación de campo para aprender cómo dotar a su producto de la máxima calidad. “Del churro no sabíamos nada; sólo que era agua, harina, sal y aceite”, confiesan Estrada y Muñoz. Compartieron horas de trabajo con maestros churreros y empezaron a experimentar con todo el proceso: la forma de amasar, el tipo de harina que usar, el tipo de aceite, la temperatura... Hasta desarrollar su propia fórmula, en la que cambian el aceite de girasol, con el que normalmente se preparan, por aceite de oliva suministrada por una cooperativa cordobesa. Un aceite que mezcla variedades -picual, picuda y hojiblanca, especialmente formulado para freir-, y que hace que el churro no coja gusto.

En Comaxurros podemos encontrar una buena variedad de churros: el básico, tradicional, hecho al momento; rellenos de nata, fresa, fruta de la pasión, merengue y crema pastelera, y lazos de chocolate, además de buñuelos de viento y 'xuxos'. Y aquí viene una de sus mayores atrevimientos: ofrecer churros salados. La estrella es el 'churrito bravo', la masa frita con salsa brava. Como las patatas. Se atrevieron con ellas el día de la inauguración, a finales del año pasado, y se convirtieron en un auténtico éxito. También los sirven con queso y sobrasada, para los paladares más atrevidos

Además de todos estos fritos, en Comaxurros tampoco falta el chocolate a la taza casero, con trece tipos diferentes de cacao, el compañero inseparable para disfrutar de una merienda de campeones.

Comaxurros

Muntaner, n 562, Barcelona

www.comaxurros.com

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