En realidad, Docamar es una taberna muy alegre y castiza donde sirven unas patatas bravas especiales. Este bar familiar ya va por su tercera generación y es muy posible que exista una cuarta y una quinta, o al menos eso esperamos, para seguir saboreando su plato estrella.

El amor por la hostelería les viene de cuna, desde que su fundador y abuelo Donato Cabrera Martínez decidiera abrir el primer local en 1927, en la calle Galileo. Es allí donde servían vermús a la antigua usanza y los mayores echaban su partida al tute. Con el tiempo aquel local de Argüelles se quedó demasiado pequeño y, en 1963, uno de los hijos de Donato decidió abrir Docamar. Fue él el que inventó esa receta tan cotizada en la que quedan bañadas las patatas y que tanta gente ha probado con tanto interés.

Tras haber pasado más de 50 años, la familia sigue regentando el negocio y siguen en el mismo sitio, en la calle Alcalá, número 337, en el barrio de Quintanar, y las patatas bravas son una de sus tapas más populares con una salsa que pica y tiene un sabor especial fruto de su receta familiar. En su carta también encontrarás otras recetas españolas típicas con las que te chuparás los dedos, desde la famosa y tradicional tortilla de patata hasta caracoles en salsa, pasando por oreja a la plancha, pulpo a la gallega o paella, entre otros platos.

No hay más, aquí no vas a encontrar platos gourmet ni cocina internacional ni siquiera recetas creativas donde se mezcle la cocina española con la asiática, nada de eso, porque Docamar es el refugio de los amantes de la comida casera sin más.  

"Las mejores patatas bravas de Madrid desde 1963", eso es lo que ellos aseguran y para comprobarlo tendrás que ir allí y pedir una ración. Merece la pena hacerlo, porque de paso podrás degustar otros manjares exquisitos de su carta. Sus patatas son cortadas con el tamaño exacto para que queden suculentas, con el punto de fritura ideal. En cuanto a la salsa, debes saber que en su cocina llevan haciendo la misma receta desde hace más de medio siglo y podrás optar por pedirla más o menos picante. También puedes llevártelas a casa y disfrutarlas con tus invitados. Sí, venden tarrinas de patatas bravas a buen precio. Por lo demás: pinchos morunos, calamares, oreja y un largo etcétera de tapeo variado y sabroso.

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