Se inculca el amor por la lectura. Es muy sencillo de hacer y es un regalo que nunca olvidarán. Libros especiales para niños únicos, que ponen cara de fascinación cada vez que los abren. Mumablue [LM1] te permite crear cuentos personalizados para los más peques de la casa. 44 páginas a todo color.

Todo el proceso es muy intuitivo. Hay varias aventuras disponibles y en diferentes idiomas. Planeta Gelatina, Burbujas, Aventuras en Alaska o El Reino de Miriñán. Por ejemplo, en este último, se lee cómo en el Reino de Miriñan ya no quedan unicornios. Escaparon huyendo de la codicia de los hombres, que se hacían con sus hermosos huevos de oro. Pero uno de ellos, llamado Otis, no tuvo tiempo de huir, y ahora vaga sólo por los rincones del Reino. Su valiente protagonista le ayudará a encontrar a su familia. Cada una de las historias incide en una serie de valores como la amistad, el compañerismo, el compartir, la valentía, la empatía o la autoestima, entre otros.

Una vez elegida la aventura, se configura al personaje protagonista: color de piel, de pelo, todo tipo de peinados, color y forma de los ojos, si tiene pecas, gafas o audífonos. Hasta el color de ropa. Tres esto, se escribe una dedicatoria. También se puede añadir una foto del peque, de la familia o de quien hace el regalo. Después, se visualiza para ver el resultado. Todos los libros son personalizados y se imprimen exclusivamente para cada cliente. Se recibe impreso, con una encuadernación resistente y en tapa dura, en menos de dos semanas (entre siete y nueve días si es en la Península) por menos de 30 euros. La Web calcula una fecha estimada de la entrega de cada pedido.

Estos cuentos están pensados especialmente para niños de entre dos y nueve años, aunque muchas mamás ya les leen cuentos a sus hijos cuando aún están en la barriguita. El germen de Mumablue se localiza en una vivencia personal de Cristina Rodríguez, su cofundadora, publicista de profesión con un master en animación 3D y postproducción digital. Cuando le ofrecieron un ascenso, ella consideró oportuno mencionar que estaba embarazada de su primera hija. Entonces, la empresa para la que trabajaba decidió cambiar su ascenso por un despido. Para ella fue un punto de inflexión, que la motivó a trabajar para ella misma y por sus sueños. La empresa comenzó siendo un estudio fotográfico donde hacía fotos a los niños en un croma y después los añadía a los cuentos en escenas fantásticas con fotorrealismo ilustrado. Llegó un punto en que ya no podía aceptar más clientes y estaba saturadísima de trabajo, así que empezó a darle vueltas a la idea de hacerlo escalable. Así nacieron los libros personalizados de Mumablue, en el que los niños se pueden convertir en auténticos protagonistas de las historias, a través de sus dobles virtuales.