El teatro de sombras consiste básicamente en realizar un espectáculo a través de todo tipo de marionetas de cartulina o tejido, con forma de animales, seres imaginarios, personajes de cuento u humanos, así como también simplemente con los movimientos de las manos, empleando una tela sobre la cual una fuente ...
El teatro de sombras consiste básicamente en realizar un espectáculo a través de todo tipo de marionetas de cartulina o tejido, con forma de animales, seres imaginarios, personajes de cuento u humanos, así como también simplemente con los movimientos de las manos, empleando una tela sobre la cual una fuente de luz se encarga de proyectar esas sombras. Es una forma idónea de salirse un poco de la norma para contar un cuento u historia, apoyándose en la música, los sonidos, jugando con las luces y sombras, etc.
Lo bueno de esta actividad es que tiene una manualidad detrás con la que mantener entretenidos a tus hijos, pasando una tarde diferente, ya que habrá que crear el escenario y los personajes adecuándose a la narración que queráis contar. Además, sirve para introducirlos en el reciclaje al darle un segundo uso a materiales que tengáis por casa. Y tiene su parte educativa al fomentar las habilidades plásticas, el trabajo en equipo, su expresividad, le enseña además que existen otras formas de diversión; sin olvidar los valores que le inculca el propio cuento.
Para construir el escenario necesitarás una caja de cartón, un cúter, unas tijeras, dos pliegos de papel mantequilla o de horno, dos pliegos de cartulina negra, silicona líquida, pegamento en barra, cinta de papel, una regla, palitos de brocheta, una lámpara de escritorio, un rotulador y el cuento que quieras representar, según indican en el canal Famfest Mori. Primero haz un marco sobre el cartón con un rotulador y una regla, dejando los márgenes pertinentes a cada lado. Corta el rectángulo con ayuda de un cúter. El otro lado de la caja debe quedar abierto, por lo que tendrás que retirar sus pliegues. Ahora, recorta el papel mantequilla dándole una forma rectangular, pero será un poco más grande que la que el recorte que habías hecho en la caja. Pégalo con el pegamento líquido al interior de la caja.
En este momento comienza la parte divertida, la de decoración exterior. Aquí podrás emplear lo que más te guste: rotuladores, tela, papel de colores, entre otros, o, simplemente hacer como indican en el vídeo, forrar con cartulina negra. No deseches los pliegues sobrantes porque te servirán para construir la marquesina de tu teatro de sombras. Así, encima escribirás el nombre de la obra a representar. Después, coloca el flexo por la parte trasera del teatro, cuanto más cerca este mayor será la calidad de la imagen.
Ahora, lo más importante es elegir el cuento o la historia que se va a contar para poder crear los decorados y personajes. Si el dibujo no es lo tuyo, siempre puedes calcar las figuras con papel cebolla y trasladarlas a una cartulina, para después pegarles los palitos de brocheta y facilitar su agarre durante la obra, como indican en el tutorial.
Otra forma de representación es utilizando en vez de títeres de papel, cartulina o tela, es colocar las manos de una determinada forma para crear o mostrar un personaje en concreto. Como si de una adivinanza se tratase, los niños tendrán que averiguar qué figura hay oculta tras las sombras. Por ejemplo, en unComo ponen en práctica esta técnica y explican todo el proceso para que puedas exhibir un perro, un conejo, un ciervo, un caracol, un cangrejo, una serpiente y un pájaro.