Se trata de un comestible pequeño de color verde oscuro, de sabor amargo y de forma redondeada, que se corresponde con el capullo o botón, antes de brotar y convertirse en una flor. Del arbusto también se aprovecha el alcaparrón, tápena o fruto de la alcaparra. Posteriormente a su recolección, ...
Se trata de un comestible pequeño de color verde oscuro, de sabor amargo y de forma redondeada, que se corresponde con el capullo o botón, antes de brotar y convertirse en una flor. Del arbusto también se aprovecha el alcaparrón, tápena o fruto de la alcaparra. Posteriormente a su recolección, se meten en un bote de cristal con agua durante unos días hasta que cojan un color dorado. En el caso de los primeros, se les realiza un corte en cruz para que se curen bien sumergiéndolos también en agua. Esto se hace para quitar el exceso de amargor. Una vez pasado el tiempo pertinente, se desecha el agua y se cambia por una nueva, se agrega una cucharada de sal y se vierte vinagre por encima. Esta técnica es lo que se conoce como salmuera. Aquí tendrán que estar entre cuatro o cinco días. Una vez que se termine el proceso, ya se podría consumir, tal y como bien explican en el vídeo de 7 TV Murcia.
Además de en solitario o en canapés, las alcaparras están muy presentes en la cocina mediterránea formando parte de ensaladas, como complemento de salsas, incorporándolas a pizzas, pastas, carnes y pescados, incluso con arroz, para dar un toque diferente a nuestras recetas y explorar nuevos sabores. Pero este alimento no sólo destaca a nivel culinario, sino que también en materia nutricional. Está compuesto principalmente por agua, en 100 gramos de este comestible hay 88,6 g de agua, 2,4 g de proteínas y 4,9 g de hidratos de carbono, por lo que posee un bajo aporte calórico, siendo ideal para combatir el estreñimiento, ya que contiene 3,2 g de fibra. En este sentido, puede emplearse para "dietas hipocalóricas", según apuntan desde el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA).
Dentro de los componentes nutricionales otro aspecto a destacar es la alta cantidad de sodio que posee, situándose en los 2.964 mg y el bajo contenido de hierro, que se coloca en 1,67 mg. "Una sola cucharada de alcaparras aporta casi 300 mg de sodio por lo que hay que controlar su consumo en pacientes hipertensos. En relación a las vitaminas, presenta pequeñas proporciones de vitamina E, vitamina C y riboflavina", señalan desde MAPA.
Un reciente estudio llevado a cabo por los investigadores de la Escuela de Medicina de Irving, procedente de la Universidad de California y que se ha hecho eco el periódico El Español, ha comprobado que la quercetina, "un compuesto que se encuentra en las alcaparras en conserva ha demostrado tener la capacidad de activar las proteínas necesarias para el normal funcionamiento del cerebro humano y la actividad cardíaca, y podría conducir incluso al desarrollo de nuevas terapias contra la epilepsia y las arritmias".
FOTO PRINCIPAL.: Photo by John Baker on Unsplash.