El pilates se basa en ejercicios de precisión que nos ayudan a tener en forma mente y cuerpo. Es un deporte donde la precisión y la simplicidad no están reñidas y nos ayudan a mantenernos en forma, combatir la ansiedad y prevenir posibles lesiones. Además, es una disciplina que podemos ...
El pilates se basa en ejercicios de precisión que nos ayudan a tener en forma mente y cuerpo. Es un deporte donde la precisión y la simplicidad no están reñidas y nos ayudan a mantenernos en forma, combatir la ansiedad y prevenir posibles lesiones. Además, es una disciplina que podemos practicar en casa muy fácilmente.
Esta disciplina recibe el nombre de su creador Joseph H. Pilates, un niño con una salud especialmente débil, pero que amaba el deporte y no quería renunciar a él. Por ello, creó una disciplina deportiva adaptada a sus características físicas que le permitían tonificar a todos los niveles. Joseph H. Pilates descubrió que controlando y ejercitando el centro del cuerpo, reforzaba todo el organismo.
Los ejercicios de Pilates basan su práctica en fortalecer los músculos lumbares, abdominales, las caderas y las nalgas.
Los movimientos de Pilates se realizan lentamente teniendo muy en cuenta la precisión y la concentración.
Es una disciplina deportiva con la que también se trabaja en profundidad el estado mental. Ayuda a concentrarse y a aprender a respirar a través de la respiración diafragmática para conseguir mantener el abdomen contraído mientras se llenan los pulmones.
Se trata de ejercicios sencillos en los que se trabaja el cuerpo como un todo, teniendo en cuenta las cadenas musculares y los músculos más profundos.
El pilates es una disciplina deportiva apta para practicar a cualquier edad.
Es realmente eficaz como disciplina de rehabilitación.
Practicar pilates aporta innumerables beneficios para la salud mental y corporal. Practicándolo 2 o tres veces por semana, una hora cada día, en poco tiempo notarás cambios notables entre ellos mayor agilidad, fuerza y vitalidad. Pero además, la práctica regular del pilates también ayuda a:
Ayuda a corregir la postura corporal. Al centrarnos en abdomen, pecho y hombros se consigue una postura correcta y se evitan los dolores de espalda.
Mejora la flexibilidad general del cuerpo. Muchos movimientos del pilates se basan en el estiramiento del cuerpo y esto ayuda a alargar los músculos.
Ganamos en agilidad en nuestros movimientos, ya que mejora la movilidad de las articulaciones.
Ayuda a mejorar la respiración y con ello conseguimos una mayor relación.
Es ideal como método complementario para recuperarse de lesiones y nos ayuda a eliminar el dolor. Además, es compatible con otras disciplinas deportivas como la natación, el running o disciplinas aeróbicas.
Nos ayudan a mejorar la concentración, a combatir el estrés.
Si estás buscando una nueva disciplina deportiva que te ayude a adaptarte a la rutina diaria de manera paulatina sin realizar ejercicios de impacto y consiguiendo trabajar todos los músculos de tu cuerpo, no lo dudes, descubre los beneficios del pilates.
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