Son muchas ya las personas que aseguran que después de un tiempo practicando yoga facial han notado su piel más tersa y firme sin necesidad de cremas u otras técnicas. Se trata de un método muy sencillo por el que podemos de manera natural estimular la producción de colágeno en ...
Son muchas ya las personas que aseguran que después de un tiempo practicando yoga facial han notado su piel más tersa y firme sin necesidad de cremas u otras técnicas. Se trata de un método muy sencillo por el que podemos de manera natural estimular la producción de colágeno en nuestra piel.
De esta forma, los ejercicios faciales pueden estimular los músculos de la cara, de manera similar a cómo una sesión regular de gimnasio puede fortalecer los músculos del cuerpo. Además, los movimientos repetitivos y recurrentes en el rostro pueden estimular el flujo sanguíneo, lo que le proporciona nutrientes a las células de la piel y estimula, como hemos dicho antes, la producción de colágeno, que, como sabemos, es la proteína responsable de mantener la piel firme y tensa. Un estudio reciente del 2018 publicado en ´Jama Dermatology´, incluso, llegó a demostrar que el ejercicio diario en esta zona puede reducir los signos del envejecimiento facial.
Este ejercicio se dirige a bastantes regiones de la cara, y es súper simple. Todo lo que tienes que hacer, tal y como asegura la experta en yoga facial Parmita Katkar en un video de TikTok es soplar un poco de aire en tus mejillas, sonreír y levantarlas 50 veces. Debes evitar entrecerrar los ojos y contorsionar otros músculos faciales", explica Katkar, ya que ese movimiento involuntario puede impedir el progreso.
Se debe hacer el ejercicio con cuidado y conciencia, pues dado que los músculos faciales son tan pequeños y delicados, es difícil aislar y activar el músculo exacto al que estás tratando de apuntar, y sobre todo, en las áreas más frágiles como los ojos y la boca. Por eso, es bastante común contener la respiración involuntariamente o tensarse (y también entrecerrar los ojos) mientras haces una postura de yoga facial.
En cuanto a cuándo practicar, muchos expertos sugieren que lo idóneo es una vez por la mañana para despertar los músculos faciales, y una vez más antes de acostarse para liberar toda la tensión que has acumulado durante el día. No necesitas practicar por mucho tiempo, solo unos pocos minutos servirán; una vez más, sus músculos faciales son mucho más pequeños y delicados que, por ejemplo, los bíceps, por lo que no necesitan tanto tiempo y esfuerzo para tonificar.
Este ejercicio facial puede parecer fácil, pero en realidad, debes concentrarte mucho para hacerlo, ya que si lo ejecutas bien, puedes tonificar al mismo tiempo la zona de los pómulos, la mandíbula, a parte de estimular la producción de colágeno, lo que puede mantener su tez flexible y tus labios más regordetes. Incluso si eres una novata en yoga facial, este ejercicio puede ayudarte a entrenar y comenzar una rutina.
Entrecierra los ojos mientras aprietas las mejillas hacia los ojos. Mantén esta postura durante cinco segundos y repite de tres a cinco veces. En realidad, este gesto simple abarca, pómulos, mejillas y mandíbula, por lo que más simple ¡imposible!
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