Si quieres comenzar a meditar, tu casa puede ser el mejor lugar para comenzar, según explica Steph Strauss, profesor de yoga e instructor de meditación. Ya que, en realidad, se trata de una práctica simple y fácil de aprender, pero que requiere de paciencia, aceptación, hábito y concentración para comenzar a notar sus beneficios.

Así, desde Esvivir, exploramos 4 tipos de meditación que puede probar, los beneficios de la meditación en el hogar y consejos sobre cómo comenzar a meditar en casa.

Encuentra un lugar acogedor

Busca un lugar en tu casa sin muchas distracciones. Esto podría ser en cualquier sitio donde te encuentres cómoda: una silla, tu sofá, un rincón de su hogar, tu dormitorio o en tu cama. Puedes acostarte, o si lo prefieres, permanecer sentada, ya que así puedes evitar dormirte. Lo ideal es que estés relajado pero alerta.

Es útil meditar en el mismo lugar todos los días, si es posible, porque esto ayuda a tu cerebro a crear un nuevo hábito saludable.

Establece un recordatorio diario

Es útil establecer un recordatorio para meditar a la misma hora todos los días. Esto puede ayudarte a construir un hábito duradero en el tiempo y, además, los beneficios de practicar podrán extenderse y sentirte a la larga mucho mejor.

Ve poco a poco

Se necesita mucha práctica y paciencia para centrar tu atención en una cosa a la vez. Por lo tanto, lo más recomendable es dar al principio pasos de bebé cuando estás empezando. comenzando. Puedes probar a hacer meditaciones más cortas al principio e ir avanzando poco a poco hasta llegar prácticas más largas y avanzadas.

No hay un marco de tiempo establecido después del cual debas comenzar a hacer meditaciones más largas; varía de persona a persona. Por lo tanto, respete su viaje y tómese todo el tiempo que necesite.

Prueba diferentes tipos de meditación

Hay un sinfín de tipos de meditación y lo que podría funcionar mejor para una persona puede no funcionar para otra en absoluto, y eso está bien. Tómate tu tiempo para explorar los diferentes tipos de meditación y ver qué es lo más útil para ti. Hoy en día existen meditaciones de todo tipo e indicadas para cosas e intenciones muy concretas. Explora y realiza aquellas que más se adapten a ti y cubran tus necesidades en ese momento.

Sé amable contigo misma

Si bien la práctica de la meditación es bastante simple, no es fácil, ni se vuelve más fácil con el tiempo. Habrá días en que la mente esté más tranquila, momentos en los que no deje de gritar o momentos en los que te encuentres en algún punto intermedio. Esto es normal. Lo más importante es encontrarse donde justo te encuentres en ese momento y aceptar lo que está presente en ti con amabilidad y respeto.