El mango es el fruto del árbol de hoja perenne Manglifera indica. Procede de Asia y se ha adaptado a diferentes zonas, siendo cultivados en el sur de España. En el pasado se consideraba símbolo de fertilidad y amor y sus hojas se utilizaban en las bodas.

El tamaño del fruto es variable, siendo lo más frecuente encontrar en el mercado los de un peso de 300-400 gramos. La piel y el hueso no son comestibles. Existen muchas variedades, siendo el más apreciado el procedente de la India.

Elígelo bien. Los recogidos en el punto justo de sazón son más ricos y conservan todas sus propiedades nutricionales. Escoge los que no resulten blandos o muy duros a la palpación y con un olor agradable, no demasiado dulzón porque podría estar pocho. Si presenta manchas negras, piel arrugada u olor desagradable, no lo escojas. Consérvalo en nevera a temperatura no muy baja y consúmelo pronto.

En su composición química destacaría que contiene agua, fibra, enzimas, (potasio, hierro, magnesio y fósforo), vitaminas (grupo B, C y E), betacarotenos (provitamina A) y fibra. Contiene pocos hidratos de carbono, grasas y proteínas y 100 gramos aportan unas 70 calorías. No contiene sodio, por lo que está indicado para dietas con restricción de este elemento.

Sus propiedades se deben a sus componentes, pudiendo destacar:

-Muy buen antioxidante por su contenido en vitamina C y E, para neutralizar los radicales libres y aumentar las defensas.

-Los betacarotenos (precursores de la vitamina A) son muy eficaces para el cuidado de la visión y la piel.

-Su contenido en triptófano, magnesio y vitaminas del grupo B favorece la relajación y el estado de ánimo positivo.

-Las enzimas de la pulpa reducen el malestar intestinal, mejoran la digestión, los gases y la diarrea, etc.

-Su riqueza en fibra (de efecto laxante y saciante) mejora el tránsito intestinal, favorece la pérdida de peso y reduce los problemas de estreñimiento.

-El potasio previene la retención de líquidos.

Se recomienda para el estreñimiento, rejuvenecimiento del pelo y la piel, mejorar el estado de ánimo, reducir el insomnio, prevenir la caída del cabello y reducir la aparición de calambres.

Prepáralo tras el pelado cuidadoso sin manchar la ropa al hacerlo. Córtalo como más te guste (en dados, rodajas, etc.) y cómelo inmediatamente. Puedes añadirle zumo de limón o de naranja. Otra opción es adicionarlo a las ensaladas (solo o con otras frutas). Prepara un licuado solo o con piña, naranja, fresas, etc. Combina bien en el gazpacho y como guarnición de carnes y pescados cocidos o a la plancha.

Cuidado con la piel del mango pues se han descrito casos de dermatitis de contacto debido a que la resina que contiene presenta propiedades irritantes. Además, por su contenido en potasio, no se recomienda su consumo a enfermos renales.