En la cocina es, seguramente, el lugar donde más energía se consume en nuestro hogar. Utilizar electrodomésticos que nos hacen la vida más fácil es inevitable, pero, ¿sabías que puedes hacerlo de forma mucho más eficiente para conseguir ahorrar más consumo eléctrico del que te imaginas? 10 consejos para ...
En la cocina es, seguramente, el lugar donde más energía se consume en nuestro hogar. Utilizar electrodomésticos que nos hacen la vida más fácil es inevitable, pero, ¿sabías que puedes hacerlo de forma mucho más eficiente para conseguir ahorrar más consumo eléctrico del que te imaginas?
Con el objetivo de ahorrar algunos euros en la factura de cada mes en agua, gas o electricidad y, además, cuidar el medio ambiente, es fundamental cambiar algunos hábitos. ¡Toma nota!
Utiliza electrodomésticos de alta eficiencia energética. Comprueba que tus electrodomésticos actuales no gastan más energía de lo necesario. El ahorro de usar este tipo de electrodomésticos puede variar hasta en una diferencia de un 60%.
Utiliza sartenes y ollas del tamaño adecuado para la cantidad de comida que está cocinando. cuanto más grande la olla o la sartén, más necesidad de electricidad o gas necesitarás para calentarla y cocinar.
Usa tapas para cubrir las ollas y las sartenes mientras cocina. De esta manera, conseguirás concentrar la temperatura dentro de la olla y o sartén y aprovechar mejor el calor y tardarás mucho menos en alcanzar la temperatura correcta.
Si eres de las que cocinan mucho en el horno, aprovecha cada vez que lo utilizas para cocinar varios alimentos al mismo tiempo. Aunque no vayas a consumirlos en ese momento, aprovecha el horno para cocinar otros alimentos, algo que además te ayudará a optimizar el tiempo en la cocina.
Precalienta el horno solo lo necesario y evita abrirlo muchas veces cuando ya esté caliente para evitar que baje la temperatura en su interior. Si necesitas ver cómo está la comida que estás cocinando, enciende la luz interior del horno.
Descongela de forma natural, evitando así el uso de microondas, algo que, además, es mucho más saludable.
A la hora de hervir alimentos, usa la cantidad de agua necesaria para evitar desaprovechar tanto agua como energía.
Incorpora en tu rutina diaria el uso de la olla a presión. Con ella podrás cocinas más rápido y con menos energía.
Evita las pérdidas de energía en la nevera. Para ello, piensa antes de abrirla, teniendo claro qué necesitas. Otro gesto que te ayudará a evitar que baje la temperatura en el frigorífico es evitar meter la comida caliente, espera a hacerlo a que consiga una temperatura ambiente.
Haz un uso eficiente del lavavajillas. ¿Sabías que es más eficiente utilizar el lavavajillas que lavar a mano? De entrada, usar el lavavajillas ayuda a ahorrar más ahora y más luz, pero eso sí, es imprescindible hacerlo de la forma adecuada. Apuesta por el modo eco y por programas con agua más fría, sí, son programas más largos, pero, contrariamente a lo que creemos, potencian en ahorro.