Los expertos señalan que, para disfrutar de un buen estado de salud, sería recomendable: 1-Disfrutar de buenas relaciones sociales Dedicar un tiempo a diario, aunque sea escaso, a fomentar las relaciones sociales positivas, especialmente si vivimos lejos de nuestros seres queridos, no es un tiempo perdido. No es preciso hablar cada día ...
Los expertos señalan que, para disfrutar de un buen estado de salud, sería recomendable:
1-Disfrutar de buenas relaciones sociales
Dedicar un tiempo a diario, aunque sea escaso, a fomentar las relaciones sociales positivas, especialmente si vivimos lejos de nuestros seres queridos, no es un tiempo perdido. No es preciso hablar cada día con todo el mundo, pero sí lo es dedicar un poco de atención regular a cada una de las personas que forman parte de nuestro mundo afectivo.
Aunque sería maravilloso poder quedar en persona y hacer algo juntos, la distancia puede complicarlo. Las nuevas tecnologías nos permiten mantener el contacto a través de mensajes o videollamadas para recordarles que no las olvidamos. Puedes organizar tu propia agenda y conectar cada día de la semana con alguien de esa lista imaginaria: el lunes con tus padres, el martes con un amigo, etc.
2-Mantener actividad física y evitar el sedentarismo
Hacer ejercicio mejora tu forma física (aparato circulatorio, respiratorio, muscular y articular, entre otros) y mental (la memoria, la concentración, la atención, la gestión emocional y reduce la probabilidad de padecer depresión).
Practicar, al menos, 3 o 4 veces a la semana algún deporte (aunque solo sea caminar 30 minutos al día), mejora la forma física y el estado de ánimo. El ejercicio físico de diferente intensidad tonifica la musculatura y aumenta la secreción de endorfinas que inducen un estado de bienestar.
3-Reconectar con la naturaleza
Sea cual sea tu ambiente natural favorito (bosque o playa, por ejemplo), te servirá para disfrutar de salud física y mental. Pasea por el campo, haz senderismo o planta hortalizas en tu huerto (incluso en la ciudad) porque aunarás los beneficios del ejercicio físico y la relajación psicológica.
4-Seguir una dieta saludable
El buen funcionamiento emocional y cognitivo del cerebro precisa una dieta variada y equilibrada por lo que disfrutar de una correcta nutrición es fundamental. Se deben incluir alimentos de todos los grupos (verduras, frutas, pescados, carnes, cereales, legumbres y lácteos), controlar las porciones e incluir un 50% de carbohidratos, un 30% de grasas y un 20% de proteínas.
A nivel cerebral, se recomienda el consumo de ácidos omega 3 y 6, vitaminas del grupo B (B6 y B12), ácido fólico, triptófano, hierro, calcio y magnesio, presentes en alimentos naturales de consumo habitual en la dieta mediterránea.
5-Vaciar la mente y desconectar un rato
Es necesario, a pesar de que vivimos en una sociedad que demanda una conexión plena. Para reducir la tensión y evitar el colapso cerebral es imprescindible reservar un momento al día, aunque sea breve, para descansar la mente. Puedes escuchar música, meditar o disfrutar de un baño con sales y velas.