Entrar en Butlin´s Skypark es como entrar en el universo de Charlie y la fábrica de chocolate a través de sus alegres colores que invaden el pavimento, pero también las torres u otros elementos decorativos. Sus formas modernas dibujan este paisaje onírico en el que los niños y niñas pueden ...
Entrar en Butlin´s Skypark es como entrar en el universo de Charlie y la fábrica de chocolate a través de sus alegres colores que invaden el pavimento, pero también las torres u otros elementos decorativos. Sus formas modernas dibujan este paisaje onírico en el que los niños y niñas pueden explorar de muchas formas posibles. El objetivo es que todos los usuarios puedan compartir su tiempo de juego en compañía y que se lo pasen en grande. Para ello cuenta con acceso para sillas de ruedas a través de la incorporación de pasarelas y rampas. Las seis zonas en las que está divido se corresponden con las emociones: Alegría, Emoción, Felicidad, Curiosidad, Calma y Sorpresa. A su vez, cada una de las cuales está representada por un color. Por ejemplo, para simbolizar la sorpresa se escogió el azul, mientras que, para la felicidad, se optó por el naranja.
Este centro de ocio y al aire libre está situado en Reino Unido y se trata de un proyecto de la compañía gallega Galopín, la cual ha protagonizado otros espacios de entretenimiento a nivel nacional e internacional que destacan por sus originales composiciones y por el uso del color. En el Butlin´s Skypark varias torres emergen de la superficie, una de ellas (la de la Emoción) posee 14 metros de altura, posicionándose así como la más alta, y desde ella sobresale un tobogán formado por un tubo de 10 metros que se ilumina cuando los pequeños se lanzan a la aventura. Por otra parte, en la torre de la Felicidad lo que les espera son redes de escalada y un tobogán en formato tubo, con un recorrido menor que el anterior (8 metros). Pero no se busca sólo que desarrollen sus habilidades motrices, sino que también hagan lo suyo con las sensoriales. La Torre de la Calma es ideal para ello, ya que ofrece música y sonidos relajantes. Para dar rienda suelta a su curiosidad deben pasarse por el balancín interactivo, formado por nada más y nada menos que 24 metros de largo, cuyos integrantes tendrán que trabajar en equipo para que se ilumine. Como no podía ser de otra forma, en este lugar hay columpios, toboganes tradicionales y juegos interactivos.
FOTO PRINCIPAL.: Imagen extraída de la página web de Butlin´s.