Las altas temperaturas nos animan a estar más tiempo al aire libre disfrutando de un paseo por las zonas verdes, organizando un pícnic, yendo en bicicleta, practicando senderismo o inaugurando la temporada de playa, río o piscina porque cualquier plan de los enumerados es apetecible en estas fechas. Pero no debemos descuidarnos y protegernos de los rayos solares porque, aunque nos parezca que estamos a salvo de sus riesgos, cualquier precaución es poca. Utilizar gafas solares, un fotoprotector para la piel, un gorro, gorra o sombrero, así como una sombrilla para resguardarse del sol en playas, pinares o jardines, es totalmente recomendable en estas fechas. Además, lo podemos combinar con el uso de prendas con protección solar. Estas están compuestas de un tejido especial que bloquea el paso de la radiación.

¿Cómo identificarlas?

Su etiqueta nos puede dar algunas pistas acerca del UPF (Factor de Protección Ultravioleta), acerca del nivel de protección que pueden ofrecer para impedir el paso de la radiación solar. Así, si en el mercado nos encontramos con un vaquero que cuenta con UPF de 100, lo que nos está indicando es que es capaz de "bloquear el 100% de la radiación", aclaran desde sabervivirtv.com, de modo que cuanto más alto sea este valor más protección nos aportará. Con respecto al tipo de prenda, esta debe cumplir unos requisitos para que sea efectiva: es preferible que sea de "manga larga, un poco holgada y bastante tupida", aconsejan desde la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU).

Otro de los aspectos a tener en cuenta es el tipo de material con el que está hecha porque, según reconoce José Aguilera Arjona, investigador del Laboratorio de Fotobiología Dermatológica del Centro de Investigaciones Médico Sanitarias de la Universidad de Málaga, en sabervivirtv.com, "los tejidos muy apretados como los sintéticos o el algodón protegen más que el lino". Aunque pudiésemos pensar que el color blanco es un buen aliado frente a los rayos solares, estamos equivocadas porque "cuanto más oscuro es el color de la prenda, mejor bloque la radiación UVA y UVB", indican en la página web.

Pero no podemos caer en la falsa creencia de que una vez que vistamos estos tejidos una barrera protectora impedirá que entremos en contacto con los rayos solares bajo cualquier circunstancia, porque no es del todo cierto. Cuando está entra en contacto con el agua, "se reduce a la mitad su factor de protección", explican desde la web anterior. Debería ser un complemento y no un sustituto del fotoprotector. De este modo, en las partes del cuerpo que queden al descubierto se debería aplicar crema solar, preferible la protección 50. Por otra parte, en el caso de que detectemos que las prendas están desgastadas, lo aconsejable sería reemplazarlas por otras nuevas, así nos aseguraremos de su efectividad.

Estos tejidos no están sólo pensados para los más pequeños, sino que cualquiera puede llevarlos puestos, hay desde camisetas en su versión manga o corta, pasando por mallas, chaquetas o sudaderas hasta accesorios, como sombreros y gorras. Se pueden adquirir en grandes almacenes, tiendas deportivas o especializadas.

FOTO PRINCIPAL.: Foto de Briana Tozour en Unsplash.