Tipos de cabello

Cada tipo de cabello tiene unas características determinadas y, por lo tanto, requiere de unos cuidados específicos. Conocer exactamente cómo es tu cabello te ayudará a saber cómo cuidarlo.

Cabello liso

El cabello liso es conocido por su apariencia suave y sin ondas. Aunque este tipo de cabello tiende a ser más resistente al frizz, puede volverse grasoso con facilidad. Para cuidar el cabello liso, es importante lavarlo regularmente con un champú suave y acondicionarlo solo en las puntas para evitar que se vea pesado. Evita el uso excesivo de herramientas de calor, como planchas o secadores, para prevenir daños y utiliza protectores térmicos antes de aplicar calor.

Hay 3 tipos de cabello liso:

• Cabello tipo 1A: es el más fino, delgado y poco voluminoso, con tendencia a ser graso.

• Cabello tipo 1B: Más gruego que el anterior, con más cuerpo y volumen.

• Cabello tipo 1C: Más resistente que los anteriores. Difícil de moldeal.

Cabello ondulado

El cabello ondulado se caracteriza por tener ondas suaves y definidas. Este tipo de cabello tiende a ser propenso al frizz y a la sequedad. Para cuidarlo adecuadamente, utiliza champús y acondicionadores hidratantes que ayuden a controlar el frizz y a mantener las ondas definidas. Evita cepillar el cabello cuando esté seco, ya que esto puede generar más frizz. En su lugar, desenreda suavemente con los dedos o usa un peine de dientes anchos cuando esté mojado.

Hay 3 tipos de cabello ondulado:

• Cabello tipo 2A: Principalmente lacio en la raíz, pero luego se vuelve ligeramente ondulado hasta las puntas. Tiene un grosor fino.

• Cabello tipo 2B: Tiene una onda un poco más definida que el tipo 2A. Posee un grosor intermedio.

• Cabello tipo 2C: Son las ondas mejor definidas que empiezan en la coronilla. Es el más grueso de los tres tipos de cabello ondulado y es fácil que se encrespe con la humedad.

Cabello rizado

El cabello rizado se caracteriza por tener rizos apretados y definidos. Este tipo de cabello tiende a ser seco y frágil, porque los aceites naturales tienen dificultades para llegar a las puntas. Para cuidar el cabello rizado, es fundamental mantenerlo hidratado. Usa productos específicos para cabello rizado, como champús y acondicionadores sin sulfatos, que ayuden a retener la hidratación. Evita el uso excesivo de champú, ya que puede eliminar los aceites naturales. En su lugar, considera co-lavar (usar solo acondicionador) para refrescar el cabello y utiliza productos hidratantes y nutritivos, como cremas para peinar y aceites, para mantener los rizos definidos y evitar el frizz.

• Cabello tipo 3A: Tiene bucles sueltos en forma de `S´. Sus rizos son gruesos.

• Cabello tipo 3B: Son los rizos más evidentes de forma más angosta y en espiral. Para mantenerlo bello requieren de mucha humedad.

• Cabello tipo 3C: Rizos gruesos, ásperos y en forma de sacacorchos. Es muy voluminoso.

Cabello Crespo

El cabello crespo es conocido por sus rizos muy apretados y su textura densa. Es un tipo de cabello que requiere una gran cantidad de hidratación y cuidado. Para cuidar el cabello crespo, es importante usar productos hidratantes y nutritivos, como acondicionadores profundos y mascarillas. Los aceites naturales, como el aceite de coco o el aceite de argán, pueden ayudar a mantener el cabello suave y flexible. Evita el uso de herramientas de calor y opta por métodos de peinado más suaves, como twists o trenzas, para evitar la rotura y mantener la integridad del cabello.

• Cabello tipo 4A: Es un tipo de cabello con mucho volumen, bien enrollado desde la raíz y con una onda en espiral. Su forma está ligeramente definida.

• Cabello tipo 4B: Cabello bien enrollado y ondulado en forma de S que tiende a ser un poco más fino que el anterior, denso y a veces frágil.

• Cabello tipo 4C: Dentro de los tipos de pelo rizados, es el más frágil de los tres y no tiene definición ni rizos. Es completamente afro. Tiende a partirse fácilmente si no se cuida con atención.