El ácido úrico es un compuesto considerado como producto de desecho formado a partir del metabolismo de las purinas. Es una sustancia que produce nuestro cuerpo de forma natural cuando las células del organismo se mueren. Además, es posible encontrar a sus precursores en muchos alimentos y bebidas que consumimos de manera habitual.

Mantener un nivel adecuado de ácido úrico es beneficioso porque presenta un efecto antioxidante. El organismo está preparado para eliminar la mayor parte del ácido úrico formado porque se disuelve en la sangre, se filtra en el riñón y se elimina en la orina. Cuando el riñón es incapaz de eliminar el ácido úrico porque consumimos demasiados alimentos que contribuyen a su formación o porque el filtrado renal resulta lento o ineficaz (normalmente con la edad) se presentan alteraciones de salud.

Los niveles elevados de ácido úrico en la sangre pueden afectar a los riñones y provocar insuficiencia renal o la formación de cálculos renales. También provocan la formación de cristales que se acumulan en las articulaciones y pueden causar inmovilidad, dolor y rigidez. Se denomina gota cuando afecta a las articulaciones de los tobillos, las rodillas o del dedo gordo del pie. Es una enfermedad que se caracteriza por la presencia de dolor intenso, enrojecimiento de la zona afectada y fiebre.

Los expertos señalan que es posible mantener niveles adecuados de ácido úrico siguiendo unas sencillas recomendaciones nutricionales entre las que destacarían:

1-Reducir el consumo de alimentos ricos en purinas, como la carne roja, el pescado azul, los embutidos o el marisco, entre otros.

2-Evitar beber alcohol.

3-Controlar los niveles de fructosa, azúcar presente de forma natural en las frutas y verduras. También se encuentra en los zumos de frutas, como aditivo (en cereales de desayuno, salsas, refrescos azucarados, dulces y postres, por ejemplo) o en forma de polvo como endulzante.

No se trata de eliminar la fruta y la verdura de tu menú diario. Estos alimentos contribuyen a la hidratación del organismo y aportan vitaminas como la C, que reducen los niveles de ácido úrico en sangre. También contienen minerales, fibra y otros compuestos beneficiosos para la salud y no presentan niveles de azúcar tan elevados como los pasteles o las bebidas azucaradas.

Resulta recomendable conocer las frutas y verduras que contienen mayor cantidad de fructosa (como pasas, dátiles o caquis, por ejemplo) y no consumirlas en exceso si tienes niveles de ácido úrico elevados. Sería recomendable el consumo de cerezas (que contienen aproximadamente 6 gramos de fructosa por cada 100 gramos y pigmentos antioxidantes, llamados antocianinas, que participan en la reducción de la inflamación), coco, albaricoque o piña, por ejemplo.