Seguro que te has encontrado en más de una ocasión con esta situación. Estás en una reunión familiar o de amigas y hay alguien que hace más caso a su móvil que a las personas con las que está. Este comportamiento, muy nocivo para cualquier interacción social, se está convirtiendo en algo común y nace de la combinación de las palabras phone (teléfono) y snubbing (hacer un desprecio). ¿Te suena, verdad? Pues entre otras muchas razones, incluida la de la mala educación, expertos psicólogos apuntan a que una de las causas que lleva a ignorar deliberadamente a otra persona cuando estamos cara a cara es la adicción al teléfono móvil. Un comportamiento peligroso, en el sentido de que se está normalizando y convirtiéndose en algo aceptado, ya que, según los psicólogos, esta conducta se conceptualiza como "reciprocidad". Es decir, ignorar a alguien por estar pendiente de nuestro teléfono móvil provoca que, el resto de personas que tenemos a nuestro alrededor, de forma intencionada o no, hagan lo mismo y se comporten igual.

Por ello, alertan de que prestar una atención desmedida al móvil y no hacer caso a las personas con las que hemos quedado y nos rodena, también puede afectar a la salud mental. Sobre todo, por esa adicción al móvil (de la que ya hemos hablado en otros posts) y que provoca estar pendiente de los sonidos que emite el teléfono en todo momento, dejando de lado otras tareas o incluso nuestras propias relaciones personales o familiares. Porque esta situación puede traer consigo consecuencias negativas, que no siempre son fáciles de identificar, pues estamos tan acostumbrados a usar el móvil que no somos conscientes, en ocasiones, de cómo este dispositivo puede modificar nuestra conducta.

Cómo evitar el phubbing

La mejor manera de frenar estas situaciones es prescindir del móvil cuando estemos con otras personas. Es decir, guardar el teléfono en el bolso u optar por silenciar o desactivar las notificaciones. Junto a esto, podemos seguir una serie de normas (que podemos establecer cada vez que nos juntemos con un grupo de amigas o familiares), para ir, poco a poco, reduciendo esa dependencia del dispositivo móvil. ¡Vamos a verlas!

- Establecer franjas horarias o pausas de descanso en el uso del móvil.

- Buscar actividades que nos gusten o nos diviertan para ocupar el tiempo y, así, olvidarnos un rato del teléfono.

- Evitar usar el movil cuando estemos haciendo otras cosas, es decir, mirar las redes sociales o contestar mensajes mientras estamos viendo la televisión o comiendo.

- Fomentar la comunicación presencial con familia y amigos.

- Y ahora que vienen las vacaciones, ¡desconectar totalmente y usar solo el móvil cuando sea realmente necesario!