Las causas del ronquido son, normalmente, sencillas. El tejido blando que conforma la nariz y la garganta vibran al respirar y la relajación de los músculos durante el sueño favorecen esa sonora vibración. En ocasiones el ronquido está causado por problemas respiratorios como la apnea obstructiva del sueño (una pausa en la respiración durante el sueño causada por el cierre de la garganta o de las vías respiratorias).

El perfil de las personas roncadoras sería: ser hombre, mayor de 50 años, obeso (especialmente si presenta grasa alrededor del cuello o en la barriga), bebe alcohol, consume fármacos sedantes y/o presenta obstrucción nasal.

Sería recomendable consultar al médico cuando:

1-El ronquido se acompaña de periodos de ausencia de respiración o de asfixia durante el sueño que, normalmente, detecta el compañero de cama o un familiar.

2-Se presenta dolor de cabeza al despertarse por la mañana.

3-Se percibe una somnolencia extrema durante el día que impide realizar las tareas habituales.

4-La persona que ronca tiene obesidad o hipertensión arterial.

5-Los ronquidos son constantes y muy potentes.

Cuando acudas a consulta, el médico analizará los síntomas y realizará una exploración completa para el diagnóstico. Si considera que es posible que presentes una apnea, puede recomendar un estudio del sueño, llamado polisomnografía.

La polisomnografía es una prueba en la que se monitorizan la respiración y otros factores relacionados con el sueño. Se realiza mientras la persona afectada duerme durante la noche, en una unidad del sueño o en el hogar de la persona afectada.

El tratamiento médico del ronquido incluye:

-Perder peso.

-Evitar beber alcohol antes de acostarse.

-Evitar el consumo de fármacos que provocan sueño las horas previas a acostarse.

-Dormir acostado de lado o con la parte superior del cuerpo elevada.

-Tomar medicamentos descongestivos para mejorar el ritmo respiratorio.

-La aplicación de diversos dispositivos (como tiras elásticas para la nariz que ayudan a mantenerla abierta, por ejemplo).

-En ocasiones, las menos, puede realizarse una cirugía específica para mantener abiertos los conductos respiratorios.

Si se presenta un trastorno como la apnea del sueño, el médico puede indicar como tratamiento:

-Colocar un protector bucal especial y adaptado que permite mantener las vías respiratorias abiertas.

-Utilizar un dispositivo de presión positiva continua en la vía aérea (conocido como CPAP) que permite mantener las vías aéreas abiertas durante el sueño.

-Practicar una intervención quirúrgica para recomponer la vía aérea o extirpar el tejido que obstruye las vías respiratorias.

Para los compañeros de cama, compañeros de habitación o miembros de la familia de la persona que ronca, también existen soluciones. Usar tapones para los oídos o dormir en otra habitación son las más eficaces.