Las alfombras vinílicas no sólo están pensadas para instalar en un espacio concreto dentro de la vivienda, sino que pueden ser colocadas en estancias en las que hay humedad como la cocina o el baño sin miedo a que entren en contacto con la grasa o el agua porque son ...
Las alfombras vinílicas no sólo están pensadas para instalar en un espacio concreto dentro de la vivienda, sino que pueden ser colocadas en estancias en las que hay humedad como la cocina o el baño sin miedo a que entren en contacto con la grasa o el agua porque son impermeables. Sirven también para los exteriores (balcones o terrazas). Reviste la zona del fregadero para evitar manchar el suelo o mitigar el impacto si te cae algo al suelo, coloca una a los pies de cama o en las zonas de tránsito, como la entrada o el pasillo. Pon una en el cuarto de juegos de los más pequeños, así evitarás que se manche el pavimento y podrán corretear descalzos sin mayor problema.
Atrévete a cambiar el aspecto del suelo de una forma sencilla y económica, ya que es posible encontrarlas con un tamaño predefinido en formato rectangular, cuadrado o redondo u obtener una a medida en función de la superficie a cubrir. En algunas tiendas o superficies comerciales las venden en rollo como los hules, de modo que las cortarán según la necesidad del cliente. Si tu suelo está rayado, desgastando o ha sufrido un golpe, disimula las imperfecciones con una alfombra de vinilo. Instala una debajo de las mesas del comedor o de la cocina como medida de prevención ante los rayones. Otro de sus puntos a su favor es que a pesar de su ligereza son antideslizantes, por lo que se fijan al suelo y no tendrás que tener miedo a los resbalones. Con ellas aportarás calidez al espacio.
Suelen estar fabricadas en PVC y a diferencia de las tradicionales el polvo no queda acumulado en su parte superior por lo que si eres alérgica al polvo o a los ácaros o hay algún familiar que lo sea con este elemento decorativo matarás el gusanillo de tener una alfombra sin recurrir a una de tejido. Además de pasarle una escoba por encima, límpialas con una fregona y aspíralas sin miedo a que se estropeen porque son bastante resistentes. Son fácilmente combinables con el resto de la decoración de tu hogar porque las hay lisas, de colores más neutros, otras más coloridas que imitan las baldosas hidráulicas tradicionales u otros materiales como los azulejos, la madera o el mármol, algunas presentan motivos florales o recrean el dibujo de una alfombra de tejido, las hay que ofrecen tonalidades más atrevidas o diseños más inspiradores, así seguro que te resultará más sencillo dar con la elegida.
FOTO PRINCIPAL.: Foto de Max Rahubovskiy.