La meditación se ha practicado durante miles de años, abarcando múltiples culturas y continentes por esta razón: sus beneficios impactan e influyen en la vida en todas las áreas: física, mental, emocional, psicológica y espiritual. Sin embargo, para experimentar los numerosos beneficios de la meditación es necesario realizarla con regularidad, no esporádicamente. Aquí hay 12 pasos para hacer de la meditación un hábito, al estilo budista.

1. Selecciona un espacio. No necesitas mucho espacio para meditar, pero busca un lugar en tu casa que te atraiga intuitivamente. A algunas personas les gusta estar cerca de una ventana que se pueda abrir, permitiendo que entren la vista, los sonidos y los olores de la naturaleza. A otros les gusta estar más apartados frente a una pared. Adorna tu espacio con un objeto que realce la meditación, como una vela, un texto sagrado o una estatua como un budita, por ejemplo.

2. Encuentra tu postura. La imagen aparentemente universal de un meditador es la de uno sentado en el suelo con las piernas cruzadas o en posición de loto con los pies apoyados en los muslos opuestos. Si bien estos puestos funcionan para algunos, no son ideales para la mayoría de las personas. De hecho, el Buda se presenta en varias imágenes en cuatro posturas distintas: sentado, de pie, caminando y reclinado. Si puedes sentarte cómodamente en el suelo o en un cojín con las piernas cruzadas, hazlo.

Si esa postura no funciona en tu cuerpo, entonces haz lo que hizo el Buda: párate, camina o acuéstate boca arriba. Además, la meditación funciona bien sentado en una silla con el respaldo recto y las manos apoyadas suavemente en los muslos. Esto se llama postura egipcia porque se cree que los antiguos faraones se sentaban así en meditación.

3. Elige una cantidad de tiempo realista. Sentarse durante horas seguidas puede funcionar para los monjes, pero no es práctico para aquellos de nosotros que vivimos y trabajamos en el mundo. Es más probable que sigas una práctica si eliges una cantidad de tiempo realista. Comienza con unos pocos minutos y vaya aumentando hasta 20 o 30 minutos. Joseph Goldstein, profesor de meditación y autor, ofrece esta sugerencia: "Intenta comprometerte a adoptar la postura de meditación al menos una vez al día.

No es necesario que permanezcas sentado durante mucho tiempo, simplemente siéntate en un cojín. Muchas veces, lo más difícil es llegar allí. Una vez que estás sentado, piensas: ´También podría sentarme unos minutos´ y, en la mayoría de los casos, estás realizando sesiones completas.

4. Comprométete a seguir un horario de meditación constante. Para convertir la meditación en un hábito, es importante encontrar un tiempo regular para meditar y luego mantenerlo. Trate su tiempo de meditación como una cita con un buen amigo. No permitirías que otros eventos y problemas te quitaran tiempo con un amigo. Aplique el mismo pensamiento a su programa de meditación. Si te sientas regularmente durante el mismo tiempo, naturalmente se convertirá en parte de tu rutina diaria.

5. Recuerda los beneficios. En los días en que la motivación es baja, puede ser útil revisar las formas en que la meditación es beneficiosa para su vida. En su libro Flip The Switch: 40 meditaciones en cualquier lugar y en cualquier momento en 5 minutos o menos, Eric Harrison escribe: "Vale la pena practicar la meditación. Relaja el cuerpo y calma la mente rápidamente; es la mejor manera de reducir el estrés; mejora tu salud y ayuda con muchas enfermedades comunes; aclara tu pensamiento; te pone en contacto con tus emociones más profundas; disipa la tristeza y la confusión... Puede traer paz, belleza y sabiduría a tu vida."

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