El futuro que nos habían mostrado en las películas de cine, donde los robots acompañaban a los seres humanos en sus tareas diarias, se hace un poquito más palpable. Estos sistemas autónomos están presentes en las cadenas de montaje, se encargan de llevar y entregar pedidos, los vemos también dentro de los centros logísticos para transportar carga, pero también dentro de los hogares, siendo quien de dejar la casa impoluta con la retirada del polvo o fregando el suelo, limpiando los cristales, recortando el césped o poniendo a punto la piscina. En Pasadena (California) han dado un paso más al incorporar un robot dentro de la cocina del restaurante de comida rápida CaliExpress by Flippy™ que, a través de la inteligencia artificial, puede identificar el producto que está preparando y saber cuando lo tiene que retirar del fuego. Así, un brazo robótico se desplaza a lo largo de un raíl para colocar las patatas en la cubeta e insertarlas dentro de la freidora. Cuando estas están listas las aparta. A continuación, otro sistema robótico vigila el cocinado de las hamburguesas, sabe cuando darles la vuelta y las introduce dentro del pan. Pero, ¿cómo sabe este mecanismo cuando los alimentos están en su punto óptimo de cocción? Porque se compone de "sensores, cámaras y algoritmos inteligentes", que unidos son capaces de saber cuándo la carne está cocinada, si una hamburguesa lleva queso, cuando el pan está dado de vuelta, si el tipo de carne que está en la plancha es pollo o si unas patatas fritas están hechas, tal y como se observa en el vídeo de Miso Robotics, la empresa que fabrica esta tecnología. Además, incrementa su productividad al atender varias cubetas de patatas y hamburguesas en simultáneo. Flippy, que es así como se llama esté robot, trabaja en colaboración con el equipo humano y este delega en la máquina las "tareas repetitivas, lentas y peligrosas, lo que libera a las personas para centrarse en aspectos más creativos y complejos de la preparación de alimentos", aseguran desde la web de Miso Robotics.

Este establecimiento funciona bajo reserva y una vez dentro de él, el usuario se dirige a una pantalla que hay al lado del mostrador para seleccionar el pedido. La carta no es muy extensa y está compuesta por hamburguesa, hamburguesa con queso, wrap de lechuga y patatas fritas. Una vez que realizada la comanda y efectuado el pago, los robots comienzan a funcionar. Según explican en la página web de la compañía, "el robot asador muele la carne en tiempo real después de realizar el pedido".

Uno de los principales objetivos de integrar esta tecnología dentro de los espacios culinarios es evitar los riesgos laborales que se podrían producir a la hora de freír alimentos: "En la estación de freír, Flippy representa avances revolucionarios en seguridad, ya que casi se pueden eliminar los deslizamientos y las quemaduras, así como en la reducción del desperdicio tanto de alimentos como de aceite", explica la compañía en un comunicado. La eficiencia es otra de las ventajas de su implantación, ya que, según asegura Rich Hull, director ejecutivo de Miso Robotics, "la toma de pedidos y la cocina robótica impulsada por IA permiten a las principales cadenas que alimentan a Estados Unidos mejorar sustancialmente la calidad, la consistencia y la velocidad".

FOTO PRINCIPAL.: Un modelo de Flippy en el Laboratorio de Innovación de Miso en Pasadena, California. Imagen: Miso Robotics.