7 recomendaciones para cocinar pepino

Carmen Reija

El pepino es un alimento de origen vegetal considerado beneficioso para la salud porque aporta numerosos compuestos nutritivos. Es muy versátil por lo que resulta un ingrediente adecuado en numerosas recetas. Puede emplearse en crudo o cocinado porque admite numerosas elaboraciones. Elige la variedad que mejor se adapte a la receta que quieres preparar para no perderte ninguna de sus ventajas.

26/06/2025

Existen numerosas variedades de pepino en función de características, como el tamaño, la forma y el color de la piel. Pueden consumirse crudos o cocinados. Cada una de ellas puede resultar más adecuada para elaborar una receta concreta, pero lo fundamental es comprender que es un alimento que puedes emplear ...

Existen numerosas variedades de pepino en función de características, como el tamaño, la forma y el color de la piel. Pueden consumirse crudos o cocinados. Cada una de ellas puede resultar más adecuada para elaborar una receta concreta, pero lo fundamental es comprender que es un alimento que puedes emplear de manera habitual en la cocina.

Los especialistas señalan que, sea cual sea la variedad, algunas recomendaciones pueden ayudarte para cocinar pepino. Destacarían:

1-Durante el verano sería el mejor momento para consumirlos porque es cuando están en su punto de sazón (resultan más crujientes y presentan un intenso aroma y sabor). Si es posible, se recomienda elegir pepinos de cultivo ecológico, pues se considera que son más ricos en antioxidantes, vitamina C y minerales (calcio, magnesio y potasio, especialmente).

2-Elige ejemplares con la piel de color verde oscuro intenso y evita los que presenten manchas amarillentas o zonas blandas. Escoge los pepinos de tamaño medio y consistencia firme (porque los grandes suelen contener pepitas duras y son más amargos que los pequeños). Se recomienda conservarlos en la parte baja de la nevera y no deben congelarse porque se ablandan y resultan desagradables al consumirlos.

3-El pepino combina bien con los cacahuetes, las alcaparras, el comino o el eneldo (que facilitan su digestión). También pueden aderezarse con vinagre, orégano, zumo de limón, aceite de oliva, yogur, menta y ajo, por ejemplo. Con el pepino encajan bien los sabores lácteos de las salsas preparadas con yogur y los sabores agrios que aportan las salsas vinagretas.

4-El sabor amargo que algunos consumidores rechazan se puede eliminar retirando la piel y los extremos del pepino o dejándolos pelados y en remojo con agua fría durante unas horas.

5-La piel es comestible y en ella se concentran la mayor parte de los nutrientes y sustancias beneficiosas (esteroles y antioxidantes, fundamentalmente) por lo que conviene consumirlo sin pelar.

6-En crudo puedes emplearlo para elaborar ensaladas, salsas, cremas, zumos, batidos, sopas frías y gazpacho, por ejemplo. Los pepinos de menor tamaño (pepinillos) son adecuados para elaborar encurtidos en vinagre.

7-Para cocinar pepino, se recomienda escoger ejemplares consistentes y tener en cuenta que, como perderán mucha agua, su tamaño va a reducirse. No se recomienda una cocción prolongada. Puedes prepararlos a la parrilla (cortados por la mitad a lo largo y colocados boca abajo unos minutos para que no se resequen), gratinados al horno, en salteados (se recomienda hacerlo rápidamente a alta temperatura porque sella la hortaliza por fuera y la mantiene crujiente por dentro y utilizar aceites que soporten bien las temperaturas altas) o encurtidos (los pepinillos se pueden encurtir en casa con vinagre o comprarlos ya así elaborados).

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