Los especialistas señalan que, entre en hipocondría y TOC existen similitudes y diferencias importantes que precisan un diagnóstico diferencial. Entre las características que se presentan en personas afectadas por hipocondría y TOC, destacarían: 1-Los pensamientos. Son repetitivos, intrusivos y molestos. Resultan difíciles de controlar o parar. Provocan gran malestar emocional y ...
Los especialistas señalan que, entre en hipocondría y TOC existen similitudes y diferencias importantes que precisan un diagnóstico diferencial. Entre las características que se presentan en personas afectadas por hipocondría y TOC, destacarían:
1-Los pensamientos. Son repetitivos, intrusivos y molestos. Resultan difíciles de controlar o parar. Provocan gran malestar emocional y son interpretados de manera distorsionada porque se presentan y se repiten.
2-La elevada sensibilidad a la ansiedad. Es la tendencia a temer las sensaciones corporales relacionadas con la ansiedad (aumento del ritmo cardíaco, sudoración excesiva, temblores, problemas digestivos y otros). Se presenta porque se realizan atribuciones erróneas acerca de la presencia y significado de esas sensaciones (se perciben como peligrosas, graves o como síntomas de una enfermedad).
3-La hipervigilancia. Se asocia a la aparición de un pensamiento desagradable o a la percepción de signos y síntomas corporales interpretados como peligrosos.
4-Las creencias distorsionadas. La intolerancia a la incertidumbre, la dificultad para soportar la ambigüedad, la falta de seguridad o certeza y los cambios y novedades no previstos, entre otras, actúan como desencadenantes de las comprobaciones, de la búsqueda de seguridad y de las compulsiones.
5-El catastrofismo. Es la tendencia a dar más importancia a las posibles consecuencias negativas de un síntoma que a las neutras o inocuas, sin tener en cuenta las experiencias previas, las circunstancias personales o el estado real de salud. Se produce una sobrevaloración de la amenaza que representa un síntoma físico, aunque sea leve.
6-La sobrevaloración de la importancia de los pensamientos. En el momento en que se presenta se considera que es muy importante y que es preciso prestarle atención. Cuando esta sobrevaloración es muy alta, suele asociarse a una mayor gravedad del problema y más resistencia al tratamiento y a las explicaciones médicas tranquilizadoras.
7-Los comportamientos que los pacientes llevan a cabo en relación con sus pensamientos y sus miedos. Las comprobaciones repetidas y excesivas relacionadas con la salud que llevan a cabo las personas con hipocondría son similares a las compulsiones de comprobación que se producen en el TOC.
8-La búsqueda de seguridad. Las conductas de comprobación están asociadas a un alivio a corto plazo de la ansiedad. Este alivio inmediato refuerza el empleo de esas conductas cuando aparece la ansiedad, convirtiendo en compulsiva la búsqueda constante de seguridad.
9-Las conductas de evitación. Pueden realizarse de forma activa o pasiva para reducir los riesgos asociados a la situación que se teme.
10-El tratamiento. Ambos pacientes responden al mismo tipo de tratamientos. A nivel psicológico se aplica terapia cognitivo conductual y, como tratamiento farmacológico, se administran inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina.
11-La comorbilidad. Los trastornos más frecuentemente comórbidos con la hipocondría y el TOC son el trastorno de pánico y la depresión, aunque entre la hipocondría y el TOC existen diferencias significativas que hacen necesario realizar un correcto diagnóstico diferencial.