Los especialistas señalan que no todos los alimentos pueden ser conservados en la nevera porque se ven afectadas sus propiedades. Destacarían: 1-Ajo. No se recomienda refrigerarlo porque pueden germinar en pocos días, adquiriendo un sabor amargo intenso y desagradable. Se debe guardar en la despensa, a una temperatura de 15 grados, ...
Los especialistas señalan que no todos los alimentos pueden ser conservados en la nevera porque se ven afectadas sus propiedades. Destacarían:
1-Ajo. No se recomienda refrigerarlo porque pueden germinar en pocos días, adquiriendo un sabor amargo intenso y desagradable. Se debe guardar en la despensa, a una temperatura de 15 grados, separado de las patatas, ya que emiten gases que pueden acelerar la germinación de las patatas. También puedes mantenerlo en conserva (cubriendo los dientes de ajo pelados en aceite de oliva, en un recipiente de cristal cerrado herméticamente) o congelarlos (enteros o picados).
2-Café. El café en grano o molido absorbe humedad y pierde su aroma y sabor en la nevera. Se recomienda guardarlo en un recipiente hermético en un lugar fresco y seco.
3-Chocolate. El frío puede alterar las grasas, afectando a su sabor y color (aparecen zonas blancas). Los cambios bruscos de temperatura varían la textura (se percibe una textura granulada o terrosa desagradable). Se recomienda guardarlo en un lugar fresco, entre 15 y 20 grados, lejos de la luz directa y en su envase original o en un recipiente hermético.
4-Frutas tropicales. El aguacate, el mango y el kiwi, por ejemplo, cuando no están maduros desarrollan daños por frío a varios niveles.
5-Pan. Guardarlo en la nevera no prolonga su frescura y, además, puede provocar una pérdida de su calidad en cuanto a sus características organolépticas (como la textura o el sabor, por ejemplo). El pan de molde en la nevera se ve sometido a un aumento de la humedad y aumenta el riesgo de que se llene de moho. Se recomienda guardar el pan a temperatura ambiente, en una bolsa de papel o envuelto en un paño de algodón para conservarlo más tiempo fresco y que mantenga sus propiedades organolépticas.
6-Plátanos. Los plátanos verdes sometidos a refrigeración pueden quedarse duros y sin sabor, porque se ralentiza su maduración. La piel adquiere un tono marrón repulsivo a la hora de comerlos. Se recomienda mantenerlos en un ambiente fresco, evitando su contacto con frutas como las manzanas porque, al madurar, emiten etileno, que puede acelerar la maduración de los plátanos que están a su lado.
Los alimentos que deben mantenerse en el frigorífico (como la carne o el pescado, por ejemplo), se recomienda que, para evitar la contaminación cruzada, se mantengan separados los alimentos crudos de los que están cocinados y guardados en recipientes de uso alimentario correctamente cerrados. Los alimentos que necesitan menos intensidad de frío (como los alimentos cocinados) pueden colocarse en las baldas superiores. Las bebidas, las salsas o las mermeladas, pueden colocarse en la puerta. En la balda inferior, justo antes del cajón de las verduras, se colocan los productos frescos (como la carne y el pescado). En los cajones inferiores pueden guardarse las frutas y hortalizas, donde quedan protegidas del frío directo.