¿Sabías que esta zona es hasta 10 veces más fina que el resto de tu piel facial? Por eso, la zona del contorno de los ojos es mucho más vulnerable al envejecimiento, la deshidratación y las agresiones externas. En este artículo te contamos por qué es tan importante cuidarla, y ...
¿Sabías que esta zona es hasta 10 veces más fina que el resto de tu piel facial? Por eso, la zona del contorno de los ojos es mucho más vulnerable al envejecimiento, la deshidratación y las agresiones externas. En este artículo te contamos por qué es tan importante cuidarla, y cómo hacerlo con gestos sencillos pero efectivos.
La piel alrededor de los ojos tiene características únicas. Es más fina, tiene menos glándulas sebáceas y está en constante movimiento: parpadeamos más de 10.000 veces al día. Todo esto la convierte en una de las primeras zonas donde aparecen signos de cansancio, estrés y envejecimiento: ojeras, bolsas, líneas de expresión y arrugas.
Errores comunes al cuidar el contorno de ojos
Muchas veces, sin darnos cuenta, cometemos errores que aceleran el deterioro de esta zona:
- Frotar al desmaquillar: uno de los errores más frecuentes. Usar demasiada fricción daña la piel y puede romper capilares.
- No usar productos específicos: como mencionamos, no todas las cremas sirven. Algunas pueden ser demasiado densas o irritantes.
- Aplicar el producto incorrectamente: usar demasiado producto o frotar en lugar de dar pequeños toques puede hacer más daño que bien.
- Dormir poco o mal: el descanso insuficiente se refleja inmediatamente en la mirada.
Claves para cuidar el contorno de ojos como una experta
Además, al tener una barrera cutánea más débil, esta zona es más propensa a sufrir irritaciones si no se usa el producto adecuado. Por eso, no vale aplicar simplemente la misma crema facial en todo el rostro. El contorno de ojos necesita cuidados específicos.
Por eso es necesario elegir un buen contorno de ojos. Busca un producto formulado específicamente para esta zona. Dependiendo de tus necesidades, puedes elegir ingredientes como:
Aplica con suavidad (y en la cantidad justa)
La forma de aplicar es casi tan importante como el producto en sí. Usa el dedo anular -el que tiene menos fuerza- y da pequeños toques desde el lagrimal hacia la sien, sin arrastrar. Con una cantidad similar a un grano de arroz es suficiente para ambos ojos.
No olvides el protector solar
Aunque no lo creas, muchas manchas y arrugas en esta zona se deben a la exposición solar. Si tu contorno no contiene SPF, aplica cuidadosamente tu protector facial cerca de los ojos (hay versiones específicas para esta área que no pican ni causan lagrimeo).
Haz del masaje tu aliado
Dedicar unos segundos a un suave masaje al aplicar tu contorno puede ayudar a estimular la microcirculación y a reducir la hinchazón. Puedes incluso usar herramientas como rodillos de jade o gua sha, siempre con mucha delicadeza.
Cuida tu descanso y tu alimentación
Dormir bien, beber suficiente agua y reducir el consumo de sal son hábitos que también impactan directamente en el aspecto del contorno de ojos.
Cuidar el contorno de ojos no tiene por qué ser complicado ni caro. Se trata de entender que esta zona merece su propio ritual de cuidado. Dedicarle unos minutos cada día puede marcar una gran diferencia con el paso del tiempo.
Una mirada luminosa y descansada es el mejor reflejo de tu bienestar. Y empieza con algo tan simple como prestarle un poco más de atención a ese pequeño, pero poderoso, círculo alrededor de tus ojos.