Tu casa habla de ti (si la dejas)

Sonia Baños

Hay casas que parecen de revista: todo en orden, colores coordinados, muebles de diseño. Y luego están esas otras casas que, sin ser perfectas, te abrazan nada más entrar. Que huelen a historia, que te hacen sentir en casa aunque no digas una palabra. ¿Sabes cuál es la diferencia? Que una está pensada para gustar… y la otra, para sentir. En esvivir.com te invitamos a descubrir cómo puedes rodearte de objetos con memoria y crear un hogar que hable de ti, de verdad.  

08/07/2025

La decoración que toca el alma Nos han hecho creer que decorar es seguir modas, pero en realidad se trata de otra cosa: de reconocerte en lo que ves. Un jarrón que era de tu abuela, una taza de ese viaje que hiciste sola, una lámpara vieja con historia, una fotografía ...

La decoración que toca el alma

Nos han hecho creer que decorar es seguir modas, pero en realidad se trata de otra cosa: de reconocerte en lo que ves. Un jarrón que era de tu abuela, una taza de ese viaje que hiciste sola, una lámpara vieja con historia, una fotografía que no necesita marco para ser valiosa. Puede que no combinen con lo que está de moda, pero encajan contigo. Y eso es lo que importa.

Incorporar objetos con historia no significa llenar la casa de cosas ni vivir anclada al pasado. Significa elegir con cariño. Pensar: ¿qué quiero que me acompañe en esta etapa? ¿Qué me recuerda quién soy? ¿Qué me hace sentir bien, aunque sea un detalle pequeño?

La decoración emocional tiene un poder sutil, pero real: convierte tu casa en un espacio vivo, auténtico, muy tuyo. Donde cada rincón tiene sentido, porque cada objeto tiene algo que contar. Y tú sabes exactamente qué.

Y si no sabes por dónde empezar, aquí van algunas ideas sencillas:

  • Combina lo antiguo con lo nuevo: esa silla antigua puede renacer con un cojín actual. La vajilla heredada se mezcla de maravilla con piezas más modernas.
     
  • Crea rincones con alma: una estantería con objetos de tus viajes, una pared con postales antiguas, un rincón con fotos de tu infancia.
     
  • Haz espacio para lo que importa: no necesitas llenar cada estante. Basta con que lo que haya tenga sentido para ti.
     

No se trata de estética perfecta, sino de autenticidad. De crear un hogar que no copie nada ni a nadie, porque ya es suficiente con que te represente a ti.

¿Te has mudado hace poco? ¿Estás empezando una nueva etapa? Entonces este ejercicio es aún más potente. No hace falta gastar mucho ni empezar de cero. Solo necesitas mirar tus objetos con nuevos ojos y preguntarte: ¿qué me da calma?, ¿qué me conecta con una versión de mí que quiero recordar?


Tu casa también puede contar tu historia
No hace falta que todo combine. Hace falta que te emocione. Que te conecte. Que te recuerde quién eres. Decorar con memoria es una forma de cuidarte, de afirmarte, de volver a ti. Porque no hay lujo mayor que vivir rodeada de cosas que te hablan al alma. Y en una casa que te abraza, nunca estás sola: estás contigo misma, con tu historia, con todo lo que has vivido.

Para que la relación de pareja mejore con los años
Qué es el skin dieting del que todo el mundo habla
¿Cómo funciona el cerebro cuando nos `enamoramos´?

Cookie Consent

This website uses cookies or similar technologies, to enhance your browsing experience and provide personalized recommendations. By continuing to use our website, you agree to our Privacy Policy