"No se trata de cuánto hacemos por nuestra piel, sino de cómo lo hacemos. La clave está en la calidad y la conciencia, no en la cantidad". Es la reflexión de la maestra de estética Yvette Pons, referente internacional con más de 30 años de experiencia, que nos recuerda este ...
"No se trata de cuánto hacemos por nuestra piel, sino de cómo lo hacemos. La clave está en la calidad y la conciencia, no en la cantidad". Es la reflexión de la maestra de estética Yvette Pons, referente internacional con más de 30 años de experiencia, que nos recuerda este principio esencial y nos da consejos de cómo llevarlo a cabo.
La limpieza es la base de cualquier rutina de belleza, pero uno de los fallos más habituales es pensar que más siempre es mejor. Utilizar productos demasiado agresivos puede alterar la barrera cutánea, provocando deshidratación, sensibilidad e irritación crónica. ¿Cuál es la fórmula correcta? La experta recomienda limpiar el rostro dos veces al día:
Por la mañana, para eliminar sudor y toxinas.
Por la noche, para retirar impurezas, polución, protector solar y maquillaje.
Una limpieza adecuada asegura que sérums y cremas posteriores sean realmente eficaces.
Otro error habitual es no ajustar los productos al clima o al estado de la piel.
En invierno, se necesitan fórmulas nutritivas y protectoras.
En verano, texturas ligeras con antioxidantes.
Seguir usando los mismos cosméticos todo el año limita la capacidad de regeneración y protección de la piel.
La piel que rodea los ojos es hasta diez veces más fina que la del resto del rostro, por lo que requiere fórmulas específicas. Pons advierte que usar productos inadecuados, frotar en exceso o aplicar cremas demasiado densas puede provocar irritación y pérdida de firmeza. La recomendación: tratamientos específicos con activos descongestivos y protección solar.
La exfoliación es clave para eliminar células muertas y potenciar la luminosidad, pero en exceso puede dañar la barrera cutánea. La regla general es una o dos veces por semana, con productos suaves adaptados a cada tipo de piel.
Según Yvette Pons, existen tres pilares fundamentales para mantener la piel sana y luminosa:
Constancia: limpieza, hidratación y protección solar a diario.
Escucha activa: adaptar la rutina a los cambios de la piel y del entorno.
Estilo de vida saludable: descanso reparador, alimentación equilibrada, ejercicio y gestión del estrés.
Más allá de productos o técnicas, Pons defiende un enfoque holístico: entender las necesidades reales de la piel y ofrecerle lo que precisa en cada momento, sin acumular cosméticos innecesarios ni dejarse llevar por modas pasajeras.
Es creadora de innovadores métodos manuales como SULYFTH®, YV-LYFTH®, ROSTROLOG-YP®, INFLAMMASSAGING® y el programa formativo MASTELIER®, que han revolucionado el sector estético.
Su experiencia y visión la han llevado a formar a profesionales en Europa, Latinoamérica y Estados Unidos a través de Yvette Pons Training, consolidando su posición como referente internacional. Ha sido ponente en congresos de prestigio y premiada por su innovación en estética profesional.